MELILLA 20 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil ha descubierto a un inmigrante subsahariano escondido en el hueco de la guantera de un vehículo conducido por un marroquí cuando pretendía pasar a Melilla procedente de Marruecos.
Según ha informado a Europa Press un portavoz de la 2006 Comandancia, los hechos han ocurrido en la frontera de Beni-Enzar, cuando los agentes que custodian la aduana inspeccionaban un turismo marca Renault, modelo 20, color gris y matrícula marroquí, conducido por un ciudadano marroquí. Los guardias empezaron a sospechar cuando observaron la presencia de una placa metálica en el fondo de la guantera del mismo al tratarse de "un signo evidente de su manipulación original".
Ante esta tesitura, procedieron a un examen exhaustivo por el que tuvieron que retirar el salpicadero del vehículo y al ser levantado de forma parcial, funcionarios policiales observaron la existencia de una persona bajo la guantera, tumbada de cúbito lateral.
Una vez retirado en su totalidad el salpicadero, confirmaron la presencia de una persona de rasgos subsaharianos, "encajonada en un espacio de muy reducidas dimensiones que dificultaba su respiración y le impedían cualquier movimiento, deduciéndose por el sistema de cierre del habitáculo que no podía haberse introducido ni poder abandonarlo por sus propios medios".
Tras ser extraído, comprobaron que se trataba de un varón, que presentaba signos de entumecimiento, alteraciones respiratorias, y debilidad extrema, "por lo que, una vez liberado, fue conducido al servicio de urgencias para su reconocimiento, donde fue atendido," siendo su estado de salud satisfactorio y dentro de la normalidad.
El inmigrante localizado, de unos 20 años, de origen subsahariano, indocumentado, que dice proceder de Ruanda, ha sido puesto a disposición judicial en calidad de testigo y posteriormente entregado al Cuerpo Nacional de Policía a efectos de la aplicación de la vigente Ley de Extranjería.
Por su parte, el conductor del vehículo que atiende a las iniciales H.A. de nacionalidad marroquí, de 23 años de edad, vecino de Nador, ha sido detenido y puesto a disposición judicial acusado de un delito contra el derecho de los Ciudadanos Extranjeros.