ROMA 8 Jun. (EUROPA PRESS9
El Vaticano ha afirmado que "es urgente evaluar y replantear los ministerios" en la Amazonía para responder a los desafíos presentes, como la falta de presbíteros y misioneros y ha abierto la puerta a crear nuevos ministerios específicamente para mujeres.
En el documento de preparación del Sínodo sobre esta región, que se extiende por los territorios de Brasil, Bolivia, Colombia, Ecuador, Guyana, Perú, Surinam, Venezuela, y la Guyana Francesa y que se celebrará en octubre de 2019, el Vaticano ha valorado la posibilidad de estudiar "el tipo de ministerio oficial que puede ser conferido a la mujer, tomando en cuenta el papel central que hoy desempeñan las mujeres en la Iglesia amazónica".
El texto, que ha sido publicado por la oficina de prensa de la Santa Sede, también ha insistido en la necesidad de crear ministerios con rostro amazónico en los que se promueva "el clero indígena y nacido en el territorio, afirmando su propia identidad cultural y sus valores" y en los que los indígenas sean los "principales interlocutores en todos los asuntos pastorales y socio-ambientales en el territorio".
Sin embargo, el Vaticano no ha aclarado si al referirse a la creación de "ministerios" esto podría extenderse a la posibilidad de que los llamados 'viri probati', hombres casados, puedan asumir algunas funciones sacerdotales.
TRATAR LAS INJUSTICIA
Se trata de un Sínodo especial, organizado por Francisco de forma inédita, para tratar de dar una respuesta eclesial a las "injusticias" que sufre esta región, si bien se ha constatado que el contenido que surja de esa reunión de obispo superará "el ámbito estrictamente eclesial amazónico" porque se enfocan "a la Iglesia universal y también al futuro de todo el planeta".
El Vaticano ha denunciado en este documento la situación de los "pueblos indígenas, ribereños, y afrodescendientes" que se ven afectados "por la llegada la minería ilegal y legal, la industria de extracción petrolera, acorralados por la expansión de la extracción de madera, y siendo los más golpeados por los conflictos agrarios y socio-ambientales".
Así arremete contra "el neocolonialismo de las industrias extractivas, los proyectos de infraestructuras que dañan su biodiversidad, y la imposición de modelos culturales y económicos ajenos a la vida de los pueblos".
Para la Iglesia católica, el grito de la Amazonía al Creador "es semejante al grito del Pueblo de Dios en Egipto". "Es un grito que anhela la presencia de Dios, especialmente cuando, los pueblos amazónicos, por defender sus tierras, tropiezan con la criminalización de la protesta - tanto por parte de las autoridades como de la opinión pública -; o cuando son testigos de la destrucción del bosque tropical, que constituye su hábitat milenario; o cuando las aguas de sus ríos se llenan de especies de muerte en lugar de vida", describe el documento.
ESCUCHAR A LOS PUEBLOS
A través de este texto, según el Vaticano, --que servirá de preparación para el Sínodo de obispos y en el que participarán exclusivamente los procedentes de los países amazónicos, así como representantes de los de los países de la Conferencia Episcopal latinoamericana (CELAM) - y representantes indígenas-- se abre una etapa de particular importancia para los nuevos caminos de evangelización basados en la escucha a estas poblaciones.
"Deben ser pensados para y con el Pueblo de Dios que habita en esa región mostrando así la necesidad de un trabajo a partir de la escucha a los pueblos indígenas y a todas las comunidades que viven en la Amazonía, y que se enfoca a la Iglesia universal y también al futuro de todo el planeta", subraya.
De este modo, se valorarán las formas de que haya un mayor acceso a la misa dominical por parte de los indígenas. Ello podría tener una incidencia "en los ministerios, la liturgia y la teología", como la llamada teología india, que quiere recuperar el pensamiento y las creencias religiosas milenarias de los pueblos originarios.
ECOLOGÍA INTEGRAL
Para el Vaticano, los procesos de evangelización deben estar "vinculados a un proceso integral de desarrollo humano", fomentando todo lo relacionado con el concepto de ecología integral, que insiste en la armonía personal, social y ecológica, reconociendo el papel de custodios de la creación tradicionalmente desempeñado por los pueblos amazónicos, sobre todo los indígenas.
En total, participarán en el Sínodo 102 obispos que discutirán sobre el "imperativo moral" de proteger a los territorios de la Amazonía en los que viven unos 390 pueblos diferentes, algunos de ellos aislados voluntariamente.
ALCOHOL Y DROGRAS, MIGRACIONES Y TRÁFICO DE PERSONAS
Por otro lado, el Vaticano también insiste en un problema real y preocupante en la región, como es el consumo de drogas y alcohol, que "representa una herida profunda en los cuerpos de los diversos pueblos amazónicos". Además, resalta "el crecimiento dramático del tráfico de personas, especialmente el de mujeres, para fines de explotación sexual y comercial".
También se afrontará el tema de los movimientos migratorios más recientes que se caracterizan "por la movilización de indígenas de sus territorios originarios a las ciudades. Actualmente, entre 70% y 80% de la población de la Panamazonía reside en las ciudades".
Otro de los aspectos básicos de cara al Sínodo de la Amazonía es la dimensión sacramental. En el propio documento, la Iglesia se ha mostrado consciente de esa situación, al afirmar que "una mirada contemplativa y una práctica sacramental acorde son clave para la evangelización en la Amazonía". "La Iglesia está llamada a acompañar y compartir el dolor del pueblo amazónico, y a colaborar en la sanación de sus heridas, poniendo en práctica su identidad de Iglesia samaritana", incide.
Está previsto que el Vaticano envíe un cuestionario a las iglesias locales para conocer sus impresiones de primera mano. Los resultados a las preguntas servirán también para la elaboración del documento de trabajo que se utilizará en el Sínodo.