Absueltos el dueño y dos técnicos del helicóptero estrellado en Torallola (Lleida)

Actualizado: martes, 20 diciembre 2011 17:55

LLEIDA, 20 Dic. (EUROPA PRESS) -

El Juzgado de lo Penal número 1 de Lleida ha absuelto a los tres responsables del helicóptero que se estrelló en 2002 en Torallola, en el Pirineo de Lleida, en un accidente en el que murieron ocho personas.

La sentencia final valora "la existencia de dudas sobre la causa última del accidente, dudas que debe calificarse como relevantes, que resultan imposibles despejar y que, en aplicación del principio 'in dubio pro reo', deben resolverse a favor del reo.

Pedro María S. M., administrador de la empresa Helieuropa Services, propietaria del aparato, y los responsables de su mantenimiento Andrés G. y José Carlos P.C. estaban acusados por Fiscalía y las familias de los fallecidos de ocho delitos de homicidio imprudente, si bien en la última sesión del juicio, el pasado octubre, el fiscal y los letrados retiraron los cargos contra el mecánico Carlos M.

En el helicóptero viajaban la delegada de Industria, Divina Esteve; el piloto, Vicente Roselló; el copiloto, Jordi Escuté; el jefe de Energía, José Santiago; el funcionario Francesc Franch; los empleados de Eléctricas Helcosa Víctor Corredor y Julio Hernández, y el jefe de líneas de Fecsa, Luis Peláez.

La Fiscalía pedía cinco años y nueve meses de prisión y acusaba a los tres responsables del aparato de reconstruir un vehículo que perteneció al Ejército del Aire sin autorización ni habilitación para ello, de aplicar durante años un programa de mantenimiento inadecuado de la nave, y de transportar pasajeros en ella pese a que Aviación Civil se lo prohibió expresamente en la última prórroga del certificado de aeronavegabilidad.

En la sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, el magistrado considera que los informes periciales más objetivos e imparciales y, por tanto, los que asume para la resolución del procedimiento, son los elaborados por el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial y por Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil del Ministerio de Fomento (Ciaiac), que indican la existencia de dudas sobre la causa última del accidente.

El magistrado considera evidente "que el accidente se produjo por la rotura y separación en vuelo del cono de cola del helicóptero con respecto al fuselaje, como consecuencia de una sobrecarga en el conjunto de cola".

La sentencia añade que según la Ciaiac, la sobrecarga en el conjunto de cola tuvo probablemente su origen en la existencia de daños en el lado derecho del cono de cola, no detectados previamente; sin embargo, debido a su destrucción completa, la existencia previa de esos daños en este lado no puede afirmarse con la certeza que requiere el derecho penal, tratándose de una mera hipótesis o conjetura.

En uno de los juicios más largos de la historia de Lleida, con una veintena de abogados por la parte acusadora y otra veintena en la defensa, algunos de los letrados de la parte acusadora pidieron indemnizaciones que superaban el millón de euros.

La vista se reanudó en octubre pasado tras suspenderse en febrero a petición de la acusación para incluir al Ministerio de Fomento como responsable subsidiario.

María S. M., administrador de la empresa propietaria del aparato se ha emocionado quedándose sin palabras al recibir la noticia, según ha explicado a Europa Press su letrado, Alfonso Serrano.

El letrado ha insistido en que ninguna de las presumibles irregularidades o discrepancias que se adujeron por las acusaciones tuvo a declaración expresa de los miembros de la Ciaiac una relación ni directa ni indirecta con el trágico accidente