La acusada de asfixiar a su hija dijo a su novio que "como los leones" mataría a su cría antes de perderla

Fachada de la Audiencia Provincial de Alicante
EUROPA PRESS
Actualizado: lunes, 2 abril 2012 16:41

Servicios Sociales le había comunicado la retirada de la custodia de la niña, de tres años

ALICANTE, 2 Abr. (EUROPA PRESS) -

La mujer acusada de asfixiar a su hija de tres años mientras dormía en una vivienda de Alicante en agosto del año pasado advirtió a su novio, horas antes de los hechos, de que ella era "como los leones, que matan a sus crías antes de que se las quiten", según ha declarado su pareja este lunes en el juicio con jurado popular que se celebra en la Audiencia Provincial de Alicante.

Los hechos se produjeron en la tarde del 17 de agosto de 2011, cuando la acusada, de 33 años, se encontraba en su domicilio, situado en la calle José García Reus de Alicante, y aprovechando que su hija de tres años dormía la siesta, la asfixió con sus manos hasta causarle la muerte, según el escrito de acusación provisional del fiscal.

A continuación, la procesada acudió a la casa de su pareja sentimental y le confesó lo que había hecho. Cuando éste la acompañó a su domicilio y comprobó que la pequeña estaba tendida sin pulso, alertó a los servicios de emergencia, que se desplazaron a la vivienda y procedieron a la detención de la madre, como responsable de la muerte.

La procesada, para la que la fiscal pide 18 de prisión por un delito de asesinato, entre lágrimas, ha declinado prestar declaración sobre lo ocurrido este lunes durante el juicio. No obstante, su novio, que ha declarado como testigo, ha confirmado que, el día antes de los hechos, la mujer recibió una carta de los Servicios Sociales en la que se le informaba de que la pequeña había sido declarada en desamparo, y que se le retiraba su custodia.

La procesada, que ya tenía otros tres hijos menores de edad de los que igualmente le habían quitado la custodia, le comunicó que no estaba dispuesta a aceptar esta decisión, e incluso el mismo día del crimen le dijo que ella "era como los leones, que matan a sus crías antes de que se las quiten".

"NO DIO CRÉDITO"

El novio de la procesada ha señalado que al oír estas palabras, en ese momento "no dio crédito" porque "no le cabía en la cabeza" algo así, pero cuando la procesada se fue a su casa con la niña por la tarde, y él la llamó para ofrecerse a cuidar a la pequeña en los días siguientes mientras intentaba resolver el problema de la custodia, ella ya le comunicó por teléfono que "era demasiado tarde" porque la niña "ya estaba muerta".

A continuación, la acusada se personó en su casa y su novio, ya preocupado por la pequeña, la acompañó a su piso y pudo comprobar que estaba tendida sobre un colchón sin pulso, según ha relatado. Por ello, intentó pedir ayuda por teléfono, y al no conseguirlo rápidamente, optó por buscar un coche policial por la calle.

Los agentes de Policía Local que le atendieron le acompañaron al domicilio, que se encontraba "sucio, destartalado, casi sin muebles y en estado de abandono", y pidieron una unidad del SAMU para atender a la pequeña, cuyos médicos sólo pudieron certificar su muerte.

ESTADO "MUY TRANQUILO Y SERENO"

En la primera jornada del juicio todos los que intervinieron en el caso, tanto agentes de Policía Local, de Policía Nacional, como el propio novio y su compañero de piso, han coincidido en destacar el estado "muy tranquilo y sereno" que mostraba la procesada, tanto antes de la muerte de la pequeña como después de lo ocurrido.

Los agentes que interrogaron a la madre sobre lo ocurrido en el domicilio han declarado que ésta les confesó que la había asfixiado "por culpa" de un documento que les mostró allí mismo, en el que se le comunicaba que se le retiraba su custodia.

La agente de Policía Local que acudió en primer lugar a la vivienda, ha apuntado que la mujer le explicó allí mismo que la niña "era lo único que tenía", que "la quería mucho". "Se desahogó conmigo diciendo que había hecho todo lo que Servicios Sociales le habían pedido que hiciera con la niña, como llevarla a la guardería, y que no entendía que ahora se la quisieran quitar".

El día de los hechos, la procesada había acudido por la mañana a reunirse con el técnico que llevaba el caso de la pequeña, y mostró una actitud colaboradora en torno a la entrega de la menor.

Por su parte, el responsable del Área territorial de Protección de Menores en Alicante, ha prestado declaración sobre la situación de la procesada y de sus hijos, ha subrayado que esta actitud suponía "un cambio muy grande" en la procesada, ya que hasta ese momento no había querido colaborar e incluso se había mostrado "agresiva" en la tramitación de este desamparo y en el del resto de sus hijos.

"ALTERACIONES"

El responsable de Protección de Menores además ha recordado que la propia acusada, cuya madre estaba afectada por un "trastorno mental importante", también fue una menor custodiada por la Generalitat valenciana.

Los servicios sociales, ha añadido, tienen constancia de que la procesada padece "una enfermedad mental", aunque no cuenta con un diagnóstico psiquiátrico porque, según ha dicho, no ha querido colaborar ni atender las citaciones para recibir atención médica de este tipo.

"En su etapa adulta se han confirmado algunas alteraciones que le fueron detectadas durante la adolescencia", ha reconocido el responsable de Protección del Menor, quien ha detallado que padece "un trastorno de afectividad y algo de esquizofrenia".

El ministerio público, en su escrito de acusación provisional, entiende que la procesada actuó "de manera impulsiva" pero no tiene "un trastorno psicótico ni signos de alteración de las facultades intelectivas ni volutivas".

No obstante, su abogado defensor considera que su cliente no era responsable de sus actos y en vez de una pena de cárcel debería recibir atención psiquiátrica especializada.

El juicio continuará este martes en la Audiencia Provincial de Alicante, con el testimonio de los peritos y forenses que valorarán el estado mental de la procesada en el momento de los hechos, y posteriormente, el jurado popular emitirá su veredicto.