SEVILLA/VALENCIA, 5 Mar. (EUROPA PRESS) -
Agentes del Cuerpo Nacional de Policía han detenido a cinco personas, cuatro hombres y una mujer, como presuntos autores de dos atracos a mano armada en Sevilla. Las detenciones se precipitaron cuando los agentes averiguaron en el transcurso de la investigación que, además, los sospechosos se disponían a sustraer a una menor de la custodia del exmarido de la detenida en la localidad valenciana de Burjassot, según ha informado la Policía en un comunicado.
Así, querían lesionar al padre de la niña con el objetivo de dejarlo impedido para su cuidado y lograr que la custodia de la menor tuviera que serle revocada.
La investigación se inició en noviembre del año pasado, después de que el día 11 de ese mes dos varones que ocultaban su rostro con cascos de motoristas sustrajeran la caja de una entidad bancaria de la calle Arroyo intimidando a los empleados con sendas pistolas; los testigos indicaron que los autores tenían acento árabe. Posteriormente, se supo que fueron ayudados por una tercera persona que sujetaba la puerta abierta para facilitarles la huida.
Días después, se perpetró otro atraco en un supermercado de la avenida Kansas City. Según los primeros indicios obtenidos por los investigadores, dos individuos encapuchados con pasamontañas y armados con pistolas sustrajeron la recaudación del establecimiento, por lo que la similitud en el 'modus operandi' y las semejanzas físicas de los autores permitió a los agentes relacionar ambos asaltos.
El "minucioso" trabajo de campo desarrollado por los policías, así como el análisis de una ingente cantidad de información obtenida --incluso de fuentes internacionales gracias a los protocolos de cooperación policial europeos-- dio sus frutos en febrero, lográndose la identificación de dos de los autores materiales de los atracos.
Seguidamente, los agentes diseñaron un dispositivo para su urgente localización y la identificación de los restantes miembros de la banda. Gracias al mismo, averiguaron que la organización estaba compuesta por cuatro personas, en concreto dos súbditos marroquíes y dos ciudadanos españoles.
Desde este momento, los investigados fueron sometidos a una estrecha vigilancia para averiguar la infraestructura con la que contaban, domicilios, pisos francos y otros lugares donde pudieran almacenar las armas y los efectos sustraídos. De forma paralela, identificaron a la pareja sentimental de uno de los súbditos marroquíes, una ciudadana española que, al parecer, estaba también plenamente integrada en la estructura de la organización.
"ESCARMIENTO" AL EXMARIDO DE UNA DETENIDA
Los hechos se precipitaron los últimos días de febrero, ya que los integrantes de la banda mostraban "gran agitación", con numerosos contactos entre sí y diversas salidas de la ciudad a localidades como Burjassot, en Valencia, o Jerez de la Frontera, en Cádiz.
Los policías sospechaban que iban a cometer un nuevo atraco, por lo que intensificaron las vigilancias sobre el grupo. Además, establecieron contacto con las unidades especializadas en este tipo de bandas tanto en Valencia como en Cádiz, de cara a determinar cuál sería su próximo golpe.
Sin embargo, en sus desplazamientos a estas ciudades los delincuentes parecían controlar una serie de domicilios particulares y no establecimientos comerciales o bancarios, de manera que todo hacía pensar que la banda no iba a perpetrar un atraco, ya que dichos domicilios estaban relacionados con la anterior pareja sentimental de la única integrante femenina de la banda y actual pareja del líder de la organización.
Así, se supo que el objetivo final era el secuestro de la hija que habían tenido en común, cuya custodia, tras la separación, había correspondido al progenitor. Según las propias palabras de los delincuentes, "habría que darle y darle hasta que esté bien despachado" durante la sustracción de la menor. Los arrestados, expertos en artes marciales y boxeo, querían lesionarle de manera grave y dejarlo impedido para el cuidado de la niña, de tal manera que la custodia de la menor tuviera que serle revocada.
DETENCIONES EN VALENCIA Y SEVILLA
Con las informaciones obtenidas por los agentes, se intensificó el control sobre estas personas y se estableció un dispositivo coordinado desde Sevilla que culminó con su detención el día 29 de febrero. Los dos súbditos marroquíes y la mujer fueron arrestados en Burjasot, en las inmediaciones del domicilio de la niña cuando se disponían a sustraerla. Se les intervino un arma de fuego, una pistola de descargas eléctricas, dos pasamontañas, un rollo de cinta americana y un bote con una sustancia líquida que pudiera ser un anestésico.
Mientras, en Sevilla se procedía a la detención de los otros dos integrantes de la organización, los dos españoles, y a la entrada y registro de todos los inmuebles relacionados con la banda. Se intervino un uniforme de Policía Local de una localidad aljarafeña, una defensa extensible de acero y una pistola simulada que había sido modificada artesanalmente para disparar munición real de 9 milímetros.
Los detenidos son A.A.O., nacido en Marruecos en 1963; la pareja de éste, la española F.M.G.P., de 1982; el también marroquí O.K., nacido en 1989, y los españoles J.A.T.L., de 1969, y J.C.D., de 1981. Sólo a J.A.T.L. le constaba una detención previa por un ilícito penal de distinta naturaleza, si bien se ha podido establecer la relación de los marroquíes con robos con violencia y armas de fuego en otros países gracias a Interpol.
Finalizadas las diligencias policiales, los detenidos quedaron a disposición judicial. La operación ha sido realizada por agentes del Grupo de Atracos de la UDEV de la Jefatura Superior de Policía de Andalucía Occidental en colaboración con agentes de la Jefatura de Policía de la Comunitat Valenciana.