MÁLAGA 7 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Málaga, a través del Área de Derechos Sociales y en colaboración con el Área de Juventud, ha editado una guía en la que advierte a los jóvenes de las consecuencias y los peligros del coma etílico.
En concreto, se ha hecho una edición de 3.000 unidades que se distribuirán entre los ingresados por coma etílico y sus familiares en los Hospitales Clínico, Carlos Haya y Civil y a aquellos centros de enseñanza que lo soliciten. También está colgada en la página web del Área de Derechos Sociales.
Bajo el título '¿Qué pasa con el coma etílico? Guía de Prevención de Consumo Excesivo de Alcohol', la publicación intenta concienciar a los jóvenes de las consecuencias de un consumo abusivo e irresponsable de alcohol, ya que una disminución en la ingesta de alcohol reduciría los ingresos en los servicios de urgencias por intoxicación, las peleas, los accidentes de tráfico o las agresiones, han explicado.
GUÍA
En la guía, que va dirigida al sector juvenil, se explicita que el coma etílico es una sobredosis de alcohol que requiere de atención médica para evitar un posible riesgo de fallecimiento. Las consecuencias mas graves son las crisis convulsivas, la hipotermia y la muerte por la aspiración del vómito.
Así, los síntomas del coma etílico son la falta de reacción, confusión, mareo, palpitaciones rápidas, dolor de cabeza, somnolencia, estupor y la perdida de conciencia.
Por otro lado, han señalado que las consecuencias del consumo continuado y abusivo del alcohol son daños y alteraciones en los sistemas nervioso central, cardiovascular y endocrino, aparato digestivo, hígado y metabolismo óseo; deterioro de las relaciones con la familia, amigos y en el entorno escolar; agresiones; y conductas de acto riesgo en las relaciones sexuales con consecuencias como embarazos no deseados o transmisión de enfermedades como la hepatitis B y C y del sida.
CONSEJOS PARA BEBER
Además, también se insertan una serie de consejos para que los jóvenes hagan un consumo moderado de alcohol. A los menores se les aconseja la abstención para evitar los problemas inmediatos y los que se generan a largo plazo.
Al resto de este grupo de población se les aconseja el consumo preferente de bebidas de baja graduación, que planifiquen cuánto se va a beber y cómo se piensa volver al domicilio, que no mitiguen la sed con el alcohol, que no mantengan la consumición en la mano porque así se bebe más, que se coma antes, que no se mezcle el alcohol con medicamentos o que no se tome alcohol si se está embarazada.
Esta guía ha contado con la colaboración de doctor Guillermo Quesada, director de la Unidad de Gestión Clínica de Cuidados Críticos y Urgencias del Hospital Carlos Haya y la doctora María Victoria de la Torre, directora de la Unidad de Gestión Clínica de Cuidados Críticos y Urgencias del Hospital Clínico.
CONSUMO
El alcohol es actualmente la droga más consumida por los adolescentes españoles, comenzándose a beber antes de los 14 años. Los jóvenes perciben que el alcohol es accesible, lo toman en compañía de sus amigos y, aunque no es un hábito generalizado, los menores ingieren en un corto periodo de tiempo, normalmente los fines de semana, grandes cantidades que ponen en riesgo su salud y que hace que algunos acaben en los servicios de urgencias.
Entre los años 2008 y 2011 en el Servicio de Urgencias del Hospital Clínico se realizaron 9.061 análisis de sangre, dando positivo en consumo de alcohol un 36 por ciento, lo que representa a un total de 3.246 personas, según han informado desde el Ayuntamiento.
El mayor consumo se produjo en varones de 36 a 50 años, donde de los 2.596 análisis realizados, el 80 por ciento fue positivo. De los 733 jóvenes de 19 a 25 años, un 43 por ciento --300-- consumió alcohol; y de los 149 jóvenes de 14 a 17 años dieron positivo 56, lo que representa un 38 por ciento.
Han destacado, asimismo, el mayor índice se registra durante los fines de semana. En cuanto a las tasas de alcoholemia, el 30 por ciento --973 personas-- tenía entre 0,31 y 1,5 gramos por litro; el 44 por ciento --1.432 personas-- entre 1,51 y tres gramos por litro y el 10 por ciento --324 personas-- registraron una tasa superior a tres gramos por litro, lo que supone una situación de coma etílico.
Por otro lado, en los últimos cinco meses se han obtenido 80 positivos en alcoholemia en el Hospital Civil y 61 en el Hospital Carlos Haya.
En Málaga el consumo de alcohol mantiene una tendencia estable en los últimos años, aunque los consumos de tipo intensivo ha aumentado. Este tipo de consumo, tal y como han precisado, está relacionado con momentos o lugares de ocio, normalmente en espacios públicos los fines de semana y con escaso control familiar.