MADRID 14 Jul. (EUROPA PRESS) -
La relación médico-paciente está cambiando de forma decisiva y sin vuelta atrás con la incorporación de las nuevas tecnologías en nuestra vida cotidiana, ya que uno de cada 6 pacientes consulta Internet antes de ir al médico, según el primer macroestudio realizado en España sobre el uso de Internet para temas de salud elaborado por el Grupo de investigación de Farmacología Social, dependiente del Departamento de Farmacología de la Universidad de Alcalá.
Según este estudio, que analiza las experiencias de uso de Internet y la actitud ante el médico y el medicamento en una población internauta, el efecto en la relación médico paciente es claro: 1 de cada 6 encuestados trata de encontrar información en Internet antes de ir al médico, y 1 de cada 4 lo hace después, para completar o contrastar la información recibida.
Respecto a la influencia de Internet en esa relación médico-paciente, los resultados muestran que el médico sigue siendo el principal informador en materia de salud y es, con diferencia, el que más confianza inspira. Internet se convierte en la segunda fuente en cuanto a la frecuencia de uso, aunque no resta credibilidad a los profesionales de la salud.
En cuanto al grado de satisfacción, Internet resulta muy convincente para el paciente buscador: el 73% se muestra satisfecho con sus hallazgos y encuentra la información que busca entre las tres primeras páginas que visita. Cuanto mayor es la frecuencia de uso y experiencia, mayor es la satisfacción con los resultados obtenidos.
Los resultados de este estudio muestran, además, que los hombres utilizan más Internet, pero son las mujeres las que más lo hacen para temas específicos de salud, llegan a duplicar la frecuencia, tanto si se trata de buscar para ellas como si es para familiares o amigos.
Sobre las herramientas Web 2.0 (foros, chats y blogs) orientadas a información sobre salud, sólo el 14,1% ha intervenido alguna vez en alguno. De ellos, el 83,3% tiene una opinión favorable de estos recursos.
A la vista de estos resultados, los profesionales sanitarios tienen el reto de adaptarse a este nuevo escenario. Internet no debe ser tomado como una amenaza, sino como una herramienta que, por el momento, ha servido para confirmar la alta capacitación del personal sanitario: los que "contrastan" la información del médico son quienes mejor lo valoran. Además, Internet puede ser un medio ideal para la difusión y el autoaprendizaje en materia de educación sanitaria.
EL ESTUDIO
El trabajo, en forma de tesis doctoral de Juan Formigós Bolea dirigida por el profesor José Luis Alloza, lleva por título "El papel de las nuevas tecnologías en la obtención y explotación de información sobre salud, medicamentos y sus consecuencias en la relación médico-paciente".
La población objeto del mismo fue toda la comunidad universitaria de la Universidad de Alcalá (UAH), esto es: 29.548 personas (26.642 estudiantes, 2.026 personas del personal docente e investigador y 880 del personal de Administración y Servicios), mediante una encuesta on-line, a la cual sólo se podía acceder mediante un link personalizado, para evitar el riesgo de que una persona contestase a más de una encuesta así como la participación de personas ajenas a la UAH.