BARCELONA 4 Jul. (EUROPA PRESS) -
El precio de la vivienda en la costa catalana se ha desplomado un 45% desde los máximos de 2007-2008, lo que supone 1,8 puntos más que la media en el arco Mediterráneo español, y ocho puntos más que en el conjunto de España, donde el ajuste ha sido del 37,2%.
Así se desprende del informe sobre el mercado de vivienda vacacional elaborado por la tasadora Tinsa y presentado este jueves en Barcelona en rueda de prensa, de donde también se extrae que la comunidad catalana posee tres de los diez municipios del Estado donde los precios han descendido con mayor intensidad.
Se trata de Castelló d'Empúries (Girona), que acumula una bajada del 53,7%, de Pineda de Mar (Barcelona), donde los precios han caído un 52,1%, y de Mataró (Barcelona), con un ajuste del 52%.
Por provincias, la crisis del sector inmobiliario ha afectado con especial dureza a Barcelona (-48,5%), seguida de Girona (-45%), y de Tarragona (-44,5%).
En cambio, Palafrugell (Girona) ha acumulado un descenso inferior al 27%, y otros municipios como Calonge (Girona), Cambrils (Tarragona), Sitges (Barcelona) y Torredembarra (Tarragona) han registrado caídas que oscilan entre el 32,4% y el 37,8%.
TENDENCIA.
En ese sentido, el estudio resalta que mientras que en municipios como Calonge, Sitges, y Vilanova i la Geltrú (Barcelona) la bajada de precios se está frenando con fuerza, en otros como Pineda de Mar (Barcelona), Lloret de Mar y Castell-Platja d'Aro (Girona) los descensos siguen siendo importantes.
El director de Desarrollo de Negocio y Márketing de Tinsa, Raúl García, ha explicado que estas importantes diferencias entre municipios también se observan en épocas de bonanza, de modo que las localidades que ahora sufren una caída de precios más fuerte, también son las que tuvieron subidas más importantes durante el 'boom' inmobiliario.
García ha resaltado que la cantidad de oferta disponible, la mayor o menor presencia de inmobiliarias y entidades financieras en el territorio --que están apostando por bajar mucho los precios para vender con más rapidez--, y el hecho de tener una demanda personalizada enfocada a un sector concreto son factores que también generan estas divergencias.
FUTURO
Según sus previsiones, las ventas del mercado de segunda vivienda en España seguirán estancadas hasta 2015 en torno a los 20.000 inmuebles anuales, de los cuales calcula que unos 5.000 serán adquiridos por extranjeros no residentes, en una proporción que aumentará con los años.
"La venta de viviendas de segunda residencia por parte de los nacionales no se reactivará hasta que no lo haga la de primera, y esto no se producirá hasta que no haya confianza y seguridad en el empleo", ha afirmado García.
Los extranjeros que más inmuebles compran en Catalunya son los franceses, belgas, y holandeses, y en menor medida los procedentes del Reino Unido, si bien el mercado ruso empieza a acaparar una cuota importante y es el que más crece en la actualidad.