MADRID 23 Nov. (EUROPA PRESS) -
La región autónoma de Xinjiang Uyghur, ubicada a unos 3.000 kilómetros al oeste de Pekín, ha invertido alrededor de seis millones de yuanes (casi 750.000 euros) para transformar el antiguo lugar de pruebas atómicas de la base Malan en un centro turístico, de acuerdo con la agencia de noticias estatal Xinhua News Agency.
El lugar donde estalló la primera bomba atómica de China de manera experimental ha abierto sus puertas al público. Se espera que el misterio que rodea el lugar y los edificios de la zona y su equipo fechado y atraigan a turistas a la región.
El proyecto transformará uno de los antiguos secretos más importantes del país en el 'Malan Military Expo Park' con el objetivo de exhibir el legado de la defensa nacional.
Ubicado en la prefectura autónoma mongola de Bayingol, a unos 380 kilómetros al suroeste de la capital de la provincia, Urumqui, Malan fue el sitio de las investigaciones y pruebas de la primera bomba atómica de China, usada en octubre de 1964.
El complejo, asentado en un sitio de 100.000 kilómetros cuadrados, fue construido en la década de 1950 con fines militares. Dejó de funcionar como centro de investigaciones en 1996, después de que China firmó el Tratado sobre la No Proliferación de Armas Nucleares.
La Universidad de Tsinghua, en Pekín, colaborará en la preservación de las instalaciones de la zona, incluyendo los laboratorios y dormitorios usados por los científicos que trabajaron en ella así como túneles a prueba de bombardeos.
Los turistas también podrán visitar el túnel de refugio antiaéreo de 300 metros, explicó el alto funcionario de la Prefectura Autónoma Mongolia Beyinguoleng, que tiene jurisdicción sobre la zona de Malan, Arken Hasim.
En los últimos años, muchas bases militares antiguas han abierto al público como atracciones turísticas. Una de ellas es la planta nuclear subterránea 816 del distrito Fuling de Chongqing, conocida como "el refugio más grande del mundo hecho por el hombre", que abrió sus puertas al público en abril de 2010.