NUEVA YORK 3 May. (OTR/PRESS) -
La Policía de Nueva York no descarta que los responsables de haber colocado el pasado sábado un coche bomba en la plaza de Times Square, que finalmente no llegó a explotar, hayan actuado movidos por el deseo de vengarse de los creadores de la serie satírica estadounidense 'South Park', que en un capítulo emitido recientemente caracterizaban a Mahoma de una forma que ha sido considerada ofensiva por muchas personas de fe musulmana, informa el diario local 'New York Daily News'.
Según fuentes policiales citadas por este periódico, se trabaja sobre la hipótesis de que la colocación del coche bomba en la céntrica plaza fuera la respuesta a la emisión el pasado mes de un capítulo de 'South Park' en que se representaba al profeta Mahoma, el fundador del Islam, vestido con un disfraz de oso.
Poco después de la emisión del capítulo, apareció en una página web estadounidense de carácter islamista una serie de amenazas contra los creadores de la serie, Trey Parker y Matt Stone, en la que incluso se llegaba a facilitar la dirección de la supuesta residencia de los dos animadores en Colorado.
"Tenemos que advertir a Matt (Stone) y a Trey (Parker) que lo que están haciendo es estúpido, y que probablemente acabarán como Theo Van Gogh por emitir esta serie", se podía leer en un mensaje colgado en la página web 'RevolutionMuslim.com'. El texto estaba acompañado por una foto de Theo Van Gogh, el director de cine holandés que fue asesinado en 2004 en Amsterdam por un joven musulmán de origen marroquí que consideraba ofensivas sus películas, pues en ellas se afirmaba que el Islam alentaba la violencia contra las mujeres.
Según 'New York Daily News', la Policía neoyorquina aún no ha podido establecer un nexo claro entre los dos sucesos, pero ciertos indicios, como el coche bomba fuera aparcado justo enfrente de la sede de Viacom, la empresa propietaria de Comedy Central, el canal por el que se emite 'South Park', o que los servicios de Inteligencia paquistaní hayan restado cualquier credibilidad a un vídeo difundido por un grupo talibán, en que reivindicaban la autoría del atentado fallido, podrían alimentar esta vía de investigación.