Valencia ha sido el escenario del Primer Congreso Internacional de Mujeres Supervivientes de violencia de género, promovido por la Fundación Ana Bella. El congreso, patrocinado por Danone, ha puesto de manifiesto la importancia de una sociedad libre de violencia contra la mujer. Desde el simposio, se ha pedido que las leyes de protección a las víctimas y las medidas reguladoras contemplen el término “superviviente” como forma de empoderamiento de quienes han sufrido maltrato. La iniciativa de la fundación va más allá de una simple cuestión etimológica y tiene que ver con modificar el rol de las mujeres maltratadas, buscando convertirlas en agentes de cambio social. A través de convenios con empresas, la Escuela Ana Bella ofrece formación profesional y personal que facilita la integración laboral de las Mujeres Supervivientes. Se trata mayoritariamente de trabajos de cara al público que promueven al mismo tiempo una mejora en la autoestima y la confianza de estas mujeres. Danone ha sido pionera en este proyecto, ayudando a la creación de la Escuela en 2011 y ofreciendo desde entonces más de 150 oportunidades de trabajo. Después de una formación, las Mujeres Supervivientes se convierten en Embajadoras Danone, trabajando como asesoras en los puntos de venta e integrándose en equipos de trabajo para favorecer la socialización y evitar la estigmatización y el aislamiento. La labor de Danone ha sido reconocida recientemente por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad.
