ALMERÍA 15 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia Provincial de Almería ha condenado a dos años de prisión y multa de cuatro meses a razón de 12 euros al día al director de una sucursal bancaria de la capital que se apropió de más de 1,1 millones de euros de clientes de la entidad.
J.T.S. ha reconocido los hechos que se le imputaban en el acto de juicio celebrado este miércoles ante el tribunal de la Sección Tercera y ha mostrado conformidad con la pena de cárcel interesada por el fiscal, que ha modificado su escrito de calificación provisional en el que pedía cinco años y tres meses de prisión.
El Ministerio Público ha considerado que procede aplicar la atenuante muy cualificada de dilaciones indebidas ya que la causa se remonta a 2009 y ha rebajado, al margen de la pena privativa de libertad, la multa de 12 meses a razón de 12 euros al día que pedía inicialmente por un delito continuado de apropiación indebida en concurso medial con un delito continuado de falsedad en documento mercantil.
Sí ha mantenido la responsabilidad civil fijada en 1.105.164 euros, por lo que el tribunal ha emplazado la decisión de suspender la condena a la ejecución del fallo y a la cuantía que en ese momento haya podido satisfacer el acusado, quien reconoció debido a las reclamaciones recibidas por el banco que "se había apropiado de algunas cantidades" y firmó un reconocimiento de deuda por esta cuantía si bien "no ha abonado nada".
J.T.S., con "ánimo de enriquecimiento ilícito", se prevalió de su cargo ya que tenía pleno acceso a la contabilidad de la oficina y a los soportes informáticos del banco". Así, entre abril de 2008 y marzo de 2009, realizó numerosas "operaciones irregulares" en perjuicio tanto de los clientes de la entidad como del propio banco.
Entre ellas, realizó disposiciones en efectivo de cantidades de cuentas de clientes que ascendieron "a 653.567 euros" y efectuó operaciones "de las que no se ha localizado contrapartida" por un montante global de "640.467,22 euros".
Asimismo, hizo entregas en efectivo de clientes "que no se contabilizaron en sus cuentas por valor de 81.000 euros e ingresos en efectivo en cuentas de clientes en las que previamente había realizado maniobras irregulares por importe de 68.700 euros".
CANCELACIÓN DE DEUDAS DE TERCEROS
En esta línea, procedió a cancelar deudas de terceros en otras entidades bancarias por un montante de 399.237,63 euros e "igualmente procedió con el dinero apropiado ilegítimamente a la normalización de saldos deudores que tenían otros clientes a través de disposiciones de cuentas de otros clientes".
Entre las actuaciones por las que ha sido condenado, hay "descuentos ficticios de efectos comerciales manipulando clasificaciones comerciales autorizadas por el banco de cinco clientes por un total de 486.570 euros" y autorizaciones de "forma irregular y previa alteración de varios documentos" para un total de 11 operaciones de financiación.
Además, contrató un seguro de ahorro "sin conocimiento ni firma de sus representantes legales por importe de 50.000 euros" e hizo una "cancelación ficticia en nombre del banco de un préstamo a nombre de una mujer".