ALMERÍA 12 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo ha confirmado una pena de siete años de prisión para el patrón de una patera con 14 personas que embarcaron en las costas de Argelia y permaneció casi cinco días a la deriva en aguas próximas a Almería tras quedarse sin combustible apenas cinco horas después de haber iniciado la travesía.
El fallo, consultado por Europa Press, rechaza el recurso de casación interpuesto por la defensa del piloto y confirma la sentencia de origen de la Audiencia Provincial de Almería por un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros con la pena más alta posible para este delito debido a la peligrosidad del viaje, cuyas condiciones obligó a hospitalizar a cinco personas.
La resolución judicial apunta en este sentido que la falta de seguridad en la navegación de la patera se vio "agravada" después de que la embarcación se quedara sin combustible a las cinco horas de partir, de modo que durante cerca de 120 horas que la patera estuvo a la deriva "hubo momentos en los que la mar estuvo mal, existiendo grave riesgo para las personas".
Asimismo, apunta que la falta de víveres provocó que alguno de los inmigrantes "tuviesen serios problemas de salud" e hizo que necesitasen asistencia médica "inmediata" tras ser rescatados, de modo que llegó a peligrar la vida de algunos de ellos. Cinco tuvieron que ser hospitalizados.
Con ello, el Alto Tribunal avala la aplicación de subtipo agravado para imponer la condena ante un trayecto que se hizo con una cantidad "insuficiente de combustible", "sin bebida, alimento, ni medios de seguridad", lo que dio lugar a un "indiscutible" riesgo generado entre los ocupantes de la patera.
Los hechos tuvieron lugar el 10 de octubre de 2022, cuando el acusado promovió con terceras personas no determinadas la entrada de forma irregular en territorio nacional con una patera que partió sobre las 14,00 horas de las costas de Orán (Argelia) con 14 ocupantes.
La embarcación de fibra, de 5,5 metros de eslora por 1,5 metros de manga, iba equipada con motor fuera borda de 90 caballos que, junto con un móvil con GPS y una brújula, manejaba el acusado, el cual carecía de pericia y capacitación técnica para navegar en alta mar.
Antes de las 20,00 horas del mismo día, el bote quedó a la deriva por la falta de fuel, de modo que durante los días siguientes, y debido al mal estado de la mar, entró agua en la embarcación. Los ocupantes de la patera tuvieron que achicar el agua con una botella de agua partida, un bidón y con las manos "al no contar con elementos adecuados para tal fin" y "existiendo grave riesgo de vuelco o hundimiento".
Los migrantes no fueron rescatados hasta el día 14 por el Servicio Marítimo Provincial de la Guardia Civil a unas 44 millas al sur del Cabo de Gata.