ALMERÍA, 23 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil ha desarticulado una organización criminal asentada en Almería dedicada al tráfico de drogas a gran escala que introducía hachís por las costas de la provincia y posteriormente la distribuía por toda Europa oculta en camiones y turismos con dobles fondos.
Según informa el Instituto Armado en un comunicado, la denominada operación 'Petricor' se ha saldado con diez detenidos y cuatro investigados en siete registros practicados en las localidades almerienses de Las Negras, Balerma, Balanegra, Berja, Pampanico y Puente del Río que han permitido intervenir 900 kilogramos de hachís, dos embarcaciones preparadas para estas actividades, númerosos vehículos entre turismos y camiones con dobles fondos, junto a armas y dinero en efectivo.
La operación desarrollada por el Equipo de Delincuencia Organizada y
Antidroga (EDOA) de la Unidad Orgánica de Policía Judicial (UOPJ) de la Guardia Civil de Almería se inició en marzo de 2021 con una primera fase destinada a determinar la estructura y mecanismos de la organización para introducir la droga por la costa de Almería con embarcaciones recreativas sin indicios externos que las pudieran identificar, pero especialmente adaptadas para estas actividades.
Según la Guardia Civil, entre los mecanismos utilizados para realizar las rutas disponen de importantes cantidades de gasolina que transportaban hasta los puertos deportivos, con el consiguiente riesgo para la navegación como para las personas ajenas a la organización que pudieran encontrarse en las inmediaciones.
En la segunda fase, una vez anulada la infraestructura de introducción de importantes cantidades de droga, los esfuerzos se centraron en el entramado logístico dedicado a la distribución de la sustancia estupefaciente a nivel internacional para la plena desarticulación de la red.
MODUS OPERANDI
El modus operandi de la organización consiste en trasvasar la droga
desde una embarcación procedente de marruecos a una embarcación de
recreo que la traslada hasta las costas de Almería. A su llegada, existe
un operativo dispuesto para cargar la droga y transportarla rápidamente
hasta las viviendas o garajes donde la ocultan hasta su posterior
distribución por Europa.
El hachís se oculta en el interior de garrafas comúnmente empleadas
para el transporte de combustible de este tipo de embarcaciones de
recreo. De esta forma, la gasolina era utilizada para posibilitar el
desplazamiento de las embarcaciones y posteriormente este tipo de
"garrafas", de entre 30 y 50 litros, se utilizan para introducir la droga para ofrecer apariencia legal, escondida también en dobles fondos de la propia embarcación.
La Guardia Civil identificó en la barriada de Las Negras un entramado de pisos y plazas de garaje que conformaban la estructura logística de dichas operativas de tráfico de droga, ya sea con la función de ser utilizados como "guarderías", viviendas para el almacenaje encubierto, o para la ocultación de los vehículos dedicados al posterior transporte de la sustancia estupefaciente a puntos lejanos. Casi la totalidad de los vehículos son extranjeros con las placas de matrícula falsificadas para dar mayor protección al transporte.
CAMIONES CON DOBLES FONDOS
Durante la segunda fase, la Guardia Civil detecta que la organización
criminal investigada cuenta con una compleja red de camiones empleados para el transporte de la sustancia estupefaciente a terceros países de la Unión Europea.
La organización contacta con personas que a cambio de una serie de
beneficios económicos mensuales, adquieren un camión, lo dan de alta
en una cooperativa de transportes y finalmente ceden su uso a la red.
A su vez participan en operativas de transporte legal para encubrir su
actividad, lo que supone entrar en competencia con transportistas y
empresas que trabajan según las normas y precios de transportes
establecidos.
Una vez que la organización disponía de los camiones, cabeza tractora y remolque, sustituía los remolques por otros que disponían de complejos
sistemas de dobles fondos, pero manteniendo las placas de matrícula
del primero. De esta forma, la red contaba con una estructura logística de camiones con dobles fondos, que figuraban a nombre de terceras
personas sin aparente vinculación a la organización, y que gracias a la
cooperativa operaban en el transporte legal de mercancías.
Parte de las contraprestaciones que la organización daba a los diferentes colaboradores necesarios se realizaban en hachís, que
posteriormente distribuían a menor escala a nivel de la provincia de
Almería y limítrofes para la obtención de los beneficios económicos
suculentos y rápidos con participaciones puntuales que permitía llevar un alto ritmo de vida.
En ese sentido se ha intervenido una cantidad importante de droga,
obtenida como forma de pago, que uno de los colaboradores se disponía
a vender a una organización externa asentada en la provincia de
Granada.
Conocido el modus operandi de la organización y sus componentes, así
como el papel que desempeñaba cada uno en la misma, los investigadores piden autorización judicial para practicar siete entradas y registros en las localidades de Las Negras, Balerma, Balanegra, Berja, Pampanico y Puente del Río.
La operación 'Preticor' se ha saldado con diez detenidos, cuatro investigados, el desmantelamiento de un cultivo indoor de marihuana y la intervención de 900 kilogramos de hachís, dos embarcaciones, numerosos vehículos entre turismos y camiones con dobles fondos, armas y dinero en efectivo entre otros efectos.
A los miembros de la presente organización criminal se les imputan los delitos de pertenencia a organización criminal, contra la salud pública (tráfico de drogas), usurpación de identidad, falsificación de documento público y quebrantamiento de condena. La operación ha sido desarrollada por especialistas del EDOA de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Almería y ha sido dirigida por el Juzgado de Instrucción número 1 de Berja.