ALMERÍA 16 May. (EUROPA PRESS) -
Dos de los tres varones que fueron rescatados en la tarde del pasado sábado de una patera que llevaba más de una semana a la deriva y que ha dado lugar, según los primeros indicios, a la desaparición de hasta ocho personas --entre ellas una mujer embarazada--, permanecen ingresados en el Hospital Universitario Torrecárdenas de Almería a causa de las graves quemaduras y nivel de deshidratación que presentaban.
Fuentes hospitalarias han confirmado a Europa Press que los perjudicados se encuentran estables a la espera de su evolución mientras que, de manera paralela, la Policía Nacional trabaja para tratar de esclarecer la circunstancias de un viaje que partió de las costas de Argelia y que, a mitad de la travesía, perdió el motor.
En este sentido, un portavoz de la Comisaría de Almería ha indicado que el Juzgado de Instrucción número 6 de Almería ha decretado el secreto de las actuaciones en el marco de las cuales se ha tratado de tomar declaración a los supervivientes, que mostraron "contradicciones" en los primeros momentos, según han apreciado desde la Subdelegación de Gobierno.
Fuentes policiales han indicado además que representantes del Consulado de Argelia en España se han desplazado hasta la provincia para entrevistarse con los supervivientes e interesarse por su situación.
Los rescatados fueron auxiliados por una patrullera española en la tarde del sábado cuando se encontraba en las proximidades del mar de Alborán. Fue el patrullero 'Infanta Elena' que se encontraba en labores de vigilancia y seguridad marítima el que rescató la embarcación con tres inmigrantes argelinos a unas 30 millas náuticas de las Islas Chafarinas.
SIN AGUA, NI COMIDA, NI MOTOR
Según los primeros datos recopilados por la Armada, la embarcación llevaba entre unos ocho y diez días a la deriva desde que perdieron el motor con el que salieron de algún punto de Argelia y en el momento del avistamiento sus tres ocupantes estaban haciendo uso de los remos, ya que se habían quedado sin motor así como sin comida ni bebida.
Uno de ellos se encontraba en estado crítico presentando al embarcar un cuadro médico difícil y desconocido además de indicaciones evidentes de deshidratación extrema, hipotermia y quemaduras y cortes en diferentes partes del cuerpo con a priori muy pocas posibilidades de superar pero que "gracias a la extraordinaria labor de todo el personal sanitario pudo superar tras ser estabilizado y responder positivamente al tratamiento suministrado".
Una vez atendidos y estabilizados a bordo fueron trasladados al puerto de Almería donde tras el atraque del patrullero fueron traspasados al Cuerpo Nacional de Policía y al personal de Cruz Roja Española presentes a la llegada del buque, a las 16,30 horas del sábado 14 de mayo.
Según relatan los propios rescatados el viaje lo iniciaron un total de once personas entre las que figuraba una mujer embarazada, esposa de uno de los supervivientes. Tras quedarse a la deriva sin propulsión ni comida ni bebida, solo han sobrevivido los tres rescatados. La Policía investiga además si alguno de ellos era el encargado de patronear la embarcación.
El subdelegado en funciones y secretario general de la Subdelegación del Gobierno en Almería, Juan Ramón Fernández, ya lamentó "el drama humano" que supone la pérdida de personas en el mar.