ALMERÍA 15 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los colectivos ecologistas inmersos en los pleitos del Algarrobico, en Carboneras (Almería) creen que la Junta de Andalucía "no hace nada por derribar el hotel ni tiene interés en derribarlo" puesto que pasarán "años" hasta que el inmueble promovido por Azata sea demolido y no los "seis meses" que ha pronosticado la consejera de Sostenibilidad y Medio Ambiente, Catalina García.
"La consejera de Medio Ambiente, cuando dice esto, lo que demuestra es que está absolutamente al margen del problema", ha valorado el abogado José Ignacio Domínguez, para quien dichas perspectivas por parte de la titular andaluza de Medio Ambiente demostrarían su "ignorancia más absoluta" sobre "la problemática del edificio".
En declaraciones a Europa Press, el letrado ha incidido en que para que se alcance la demolición del polémico hotel es preciso, en primer lugar, que el Ayuntamiento "cumpla la sentencia" y proceda a "anular la licencia" de obras sobre la que se sostiene la construcción.
"Llevamos ya intentando que el Ayuntamiento cumpla las sentencias muchos años", ha recordado Domínguez, quien ha dado por seguro que, en caso de que se consiga que el Consistorio acceda a la anulación de dicha licencia "dentro de no se sabe", Azata recurriría dicha decisión, de modo que el pleito continuará en los tribunales "varios años".
Igualmente, contempla que en el escenario en el que se confirme la nulidad del a licencia "habrá que iniciar un expediente de devolución, que nuevamente será recurrido por Azata a los tribunales", según ha vaticinado, por lo que "tenemos ahí unos cuantos años más también hasta que ya finalmente haya una sentencia de demolición".
En este sentido, el letrado considera que los tiempos de tramitación judicial y resolución que se van a producir aún en cada uno de los avances que se van a dar durante el proceso van a suponer "años" de espera antes de que el hotel sea derribado más allá de los protocolos suscritos entre el Gobierno y la Junta de Andalucía para emprender dicha labor.