Demolición, en El Algarrobico
EUROPA PRESS/GREENPEACE
Actualizado: jueves, 6 julio 2017 11:15

ALMERÍA 6 Jul. (EUROPA PRESS) -

Greenpeace ha lanzado una campaña en redes sociales para recabar de los ciudadanos propuestas "originales y arriesgadas" para solicitar la demolición del hotel de Azata del Sol en el paraje de El Algarrobico, en Carboneras (Almería).

Las respuestas que se trasladen a la pregunta "¿Cómo exigirías a la Junta de Andalucía la demolición inminente del hotel de El Algarrobico?" serán sometidas a una selección de ideas que se llevarán a la práctica "próximamente", según ha informado la organización conservacionista en un comunicado.

Desde Greenpeace han recordado que las obras del establecimiento de una veintena de plantas y 411 habitaciones fueron paralizadas por orden judicial hace "más de diez años" y que diversas sentencias de tribunales superiores han determinado que "es ilegal".

"El hotel de El Algarrobico, convertido ya en emblema de Greenpeace contra la destrucción de la costa, se construyó en un parque natural, en suelo no urbanizable, y a menos de 20 metros de la orilla del mar", han remarcado para señalar que desde hace cuatro años, la Junta de Andalucía cuenta con una sentencia que avala el derecho de retracto que sobre la finca ejerció en 2006 por 2,3 millones de euros y es "propietaria legal de los terrenos".

Para Greenpeace, después de "12 años de lucha, siete acciones directas y más de una veintena de sentencias", el hecho de que el hotel "siga en pie" indica que es el momento "de implicar directamente a la sociedad civil en la exigencia pública de una medida reiteradamente dilatada", por lo que anima a participar a través de la web, Youtube, Facebook o Twitter, usando el hashtag #TiraelAlgarrobico.

De entre todas ellas, Greenpeace elegirá la idea más creativa para que su autor se una a la organización, pasando un día a bordo del barco Esperanza, como parte de la tripulación, el próximo sábado 15 de julio, en Cartagena, en el marco de la campaña 'Protección a toda costa'.

"En Greenpeace hemos hecho de todo. Y hemos conseguido mucho. Pero nos falta la última victoria: que se tire el hotel y se reconstruya la zona. Y para eso hay que convencer a la Junta de Andalucía y al Ministerio de Medio Ambiente", ha concluido la organización, que, a lo largo de estos años, ha ocupado el inmueble durante días, ha parado las obras, ha cubierto sus 18.000 metros cuadrados de verde, ha pintado un punto negro de 8.000 metros cuadrados, ha montado una oficina, ha llevado al Rainbow Warrior, se ha subido a sus grúas y ha llevado a la zona una bola de demolición simbólica.

Más noticias