ALMERÍA 11 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Juzgado de lo Social número 3 de Almería ha resuelto obligar a la empresa Eulen Seguridad a dotar de equipos de protección individual (EPI) y material de protección adecuada a los 19 trabajadores de su plantilla que presta servicio en el Hospital de El Toyo, en la capital, y en el Hospital de Poniente, en El Ejido.
En un comunicado, CSIF informa de que el juez "da la razón" al sindicato, que denunció cuál era la situación también ante la Inspección de Trabajo y, "basándose precisamente en dicho informe", obliga a la empresa a hacerlom en un plazo de 24 horas.
Indica que el juez considera que "la solicitud de adopción de medidas cautelares formulada por CSIF se ha efectuado por razones de urgencia y salud pública" y asegura que se ha puesto "en grave peligro la salud, el derecho a la vida y a la integridad física de los mismos, lo que puede suponer contravención o infracción de la normativa existente en materia de prevención de riesgos laborales".
CSIF ha tildado de "incomprensible cómo la propia empresa realiza, en un primer momento, una evaluación que establece la necesidad de implantar determinadas medidas de seguridad y protección" para después "no ponerlo en práctica, dado que no entrega el material oportuno a dichos trabajadores".
En mayo, el sindicato trasladó que la la empresa de vigilancia era la encargada de la Seguridad Privada del Hospital de Alta Resolución de El Toyo, con cinco trabajadores y también del Hospital de Poniente, con 14 vigilantes y que entregó a estos últimos "solo tres trajes de buzo desde que diera comienzo el estado de alarma sanitario", así como "escaso material de protección como mascarillas quirúrgicas y guantes".
"Estos tres equipos de protección individual tuvieron que utilizarlos en más de diez intervenciones diarias con la obligación de desinfectarlos, teniendo en cuenta que cada vez que había un caso de covod-19 debía haber un vigilante de seguridad abriendo paso y otro cerrando y que hacían entre seis y siete movilizaciones diarias de pacientes infectados", ha remarcado.
Ha añadido que puso en conocimiento de Eulen "las evidentes quejas y reclamaciones de sus trabajadores" pero que la empresa les emplazaba "a que pidieran ellos mismos material de protección al hospital donde desempeñaban su labor, cuando debería ser la empresa la principal garante de salud y seguridad de su plantilla tal y como dictamina la normativa del Ministerio de Sanidad en materia de prevención de riesgos laborales".
El Juzgado de lo Social ha requerido a Eulena para que, "con carácter urgente e inmediato, en todo caso en el término de 24 horas", provea a todos sus trabajadores vigilantes de seguridad en los Hospitales de Poniente y El Toyo, "de los equipos de protección necesarios y adecuados para garantizar la salud y la integridad física, tales como guantes, mascarillas FFP2, batas, gafas antisalpicaduras y geles desinfectantes".