Transportes cambiará la valla que bordea la A-7 desde Almería a Roquetas de Mar para evitar atropellos de fauna

ALMERÍA 11 Jul. (EUROPA PRESS) -

El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible ha licitado por 601.676,61 euros (IVA incluido) las obras de sustitución de la valla de cerramiento para evitar atropellos de fauna salvaje en la autovía A-7, entre los kilómetros 790 y 800, a su paso por los términos municipales de Almería, Enix y Roquetas de Mar, en la provincia de Almería.

Parte del ámbito de la obra se desarrolla sobre espacios incluidos en la Red Natura 2000, concretamente sobre la Zona de Especial Conservación (ZEC) Sierra de Gádor y Enix, según ha recordado Transportes en una nota.

El objetivo principal de esta intervención es evitar que los animales accedan a la carretera y reducir así su atropello. En el caso de que accedan, es necesario contar con rampas de escape que muevan los animales hacia los pasos de fauna y fuera del recinto vallado.

"Puesto que es imposible lograr por completo su acceso, se facilita su salida cuanto antes para que no se encuentren perdidos deambulando por la plataforma, lo que supone la situación más peligrosa", han explicado.

Esta actuación contribuye de forma "decisiva" a reducir la fragmentación del ecosistema que la propia construcción de la vía produce, de manera que se evita que se reduzca la población de las distintas especies "eludiendo la consanguineidad y la muerte por atropellos".

La medida favorece además obtener "metapoblaciones", al juntar las de ambos lados de la infraestructura, de lo que resulta funcionalmente una agrupación de mayor tamaño y genéticamente más sostenible.

También se contribuye a mantener el equilibrio natural, conservando los hábitats y beneficiando a una amplia variedad de especies de plantas y animales, muy en particular de ecosistemas mediterráneos en franco declive en la actualidad.

UNA CERCA DE 30 AÑOS

La valla de cerramiento existente en el tramo es de 1,50 metros de altura y ha sufrido cierto desgaste desde que se colocó hace unos 30 años, lo que afecta a su funcionalidad y eficacia.

Este deterioro se ve agravado por el ambiente marino de la zona, por lo que se considera necesario sustituirla mediante su desmontaje y la demolición del hormigón de la cimentación.

El contrato también incluye la carga y transporte del material a gestor autorizado. Tras la retirada, se procederá al desbroce de una franja de 0,50 metros a ambos lados de la alineación donde se colocará el nuevo vallado.

El nuevo cerramiento será de dos metros de altura, de los cuales 1,80 se encuentran por encima del nivel del terreno y los 20 centímetros iniciales enterrados, estará compuesto por postes metálicos cada cuatro metros, arriostramiento cada 40 metros y malla de acero galvanizado anudada con distancia entre los hilos verticales de 15 centímetros. Se colocará una malla de acero galvanizado de refuerzo de triple torsión de un metro para pequeños vertebrados adosada en la base.

Los postes serán tubos de acero galvanizado en caliente, con recubrimiento mínimo de 400 g/m2 en ambas caras, y tendrán un diámetro de 50 milímetros y un espesor de pared de 1,5 milímetros

Se prevé la construcción de sistemas de escape para aquellos animales salvajes que, por cualquier motivo consigan entrar en la plataforma de la carretera y queden atrapados entre el vallado, puedan retornar a la parte exterior de la vía. Estos sistemas de escape deben garantizar que no constituyan puntos de entrada para la entrada al interior de la zona vallado.

En concreto, se han proyectado cinco rampas de escape. Son rampas de rellenos de tierras con forma de cono truncado adosados a un muro de hormigón armado que ejecutar. De este modo los animales atrapados que se desplacen por el margen de la vía, porque accidentalmente puedan acceder a la zona vallada de la plataforma de la autovía, podrán ascender por las rampas y saltar a la parte exterior.

Estas obras, cuya licitación tendrá su anuncio correspondiente próximamente publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE), se enmarcan en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, financiado por la Unión Europea NextGenerationEU, dentro del capítulo de sostenibilidad, eficiencia energética y acción contra el ruido.