ALMERÍA 2 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia Provincial de Almería acoge este viernes la vista oral contra un hombre acusado de intentar matar a otro en el transcurso de una discusión en un bar de Níjar (Almería) "clavándole" una botella de cristal rota en el cuello, lo que le seccionó la vena yugular.
J.E.J. se enfrenta a penas que suman diez años de prisión un delito de homicidio en tentativa, y a delitos de resistencia y lesiones ya que, cuando los agentes de la Guardia Civil iban a detenerlo, causó a uno de ellos la fractura de la falange distal de un dedo de la mano derecha.
En la vista oral que se va a celebrar ante el tribunal de la Sección Segunda también será enjuiciada la víctima, M.E., para quien el Ministerio Público interesa una pena de dos años de cárcel ya que, en el transcurso de la riña, propinó "diversos" golpes a J.E.J. con una botella, ocasionándole lesiones en la espalda y la región occipital.
Según recoge el escrito de calificación provisional, consultado por Europa Press, ambos procesados iniciaron un disputa en la madrugada del 16 de octubre de 2013 en el interior de un bar de la barriada nijareña de San Isidro, que continuó en el exterior del local.
Una vez en la calle, J.E.J., tras "propinar un empujón" a M.E., fracturó una botella de cristal "con la intención de ocasionarle la muerte" y, al tiempo que le decía a los testigos presenciales "que dejaran que lo matara", se la "clavó" *presuntamente en el cuello, "produciéndole también un corte en el hombro derecho".
Como consecuencia de la agresión, M.E. sufrió lesiones "muy graves" como la sección de la vena yugular externa "con afectación vascular y muscular" y riesgo vital por "shock hipovolémico". Salvó la vida gracias a que recibió "medidas terapéuticas" de forma "inmediata" y tratamiento quirúrgico por el que estuvo hospitalizado cinco días e incapacitado otros 59.
Por su parte, según indica el Ministerio Público, la víctima, "con ánimo de menoscabar la integridad física" de J.E.J., le propinó "diversos golpes en la espalda y la cabeza" con una botella que le ocasiones lesiones de las que tardó en curar 12 días y que le dejaron como secuelas tres cicatrices.
El escrito recoge, asimismo, que J.E.J. habría adoptado una "actitud agresiva y obstaculizadora" cuando la Guardia Civil iba a proceder a su detención, con "evidente menosprecio del principio de autoridad" y con "fuerte oposición", por lo que uno de los agentes resultó lesionado y tuvo que estar de baja médica durante 57 días.
La Fiscalía va interesar en concepto de responsabilidad civil que el principal procesado indemnice al otro con 5.835 euros y al guardia civil con 1.710 euros mientras que pide que M.E. abone a J.E.J. un total de 870 euros.