CÁDIZ 26 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (Apdha) ha pedido "vías seguras" para acceder a España que impidan que los inmigrantes tengan que arriesgar su vida en el mar. En este sentido, ha señalado que en el año 2017 se triplicaron las entradas en España, con 22.149 personas, y que un total de 249 perdieron la vida intentando llegar al país.
En la presentación de su Balance Migratorio 2017, la asociación ha indicado que se constata un aumento en la llegada de personas procedentes de otros países a España, sumando vías marítimas y terrestres. En este sentido, ha señalado que este incremento se produce al tiempo de un "descenso muy significativo del resto de rutas hacia Europa".
"El aumento de la represión, la persecución de las ONG y la situación infernal en Libia dan cuenta de ese descenso de migrantes en el Mediterráneo central, que han buscado vías alternativas en el entorno del Estrecho", ha indicado Apdha.
Además, la asociación ha afirmado que "las medidas de contención de los flujos concertadas con los países de origen, la represión ejercida contra los migrantes y los mecanismos de cierre de fronteras de la 'Europa Fortaleza' no son capaces de frenar los movimientos de personas, que en ocasiones llevan años sorteando países para alcanzar un lugar mejor donde vivir".
A juicio de Apdha, el incremento de llegada de inmigrantes a las costas españolas "ha puesto de manifiesto de nuevo, como ocurrió en 2006, que no existen estructuras ni medios adecuados para atender dignamente a las personas llegadas tras un largo calvario y para que se respecten sus derechos", lo cual "ha quedado en evidencia en puntos como Málaga, Barbate o Motril".
FALLECIDOS EN EL INTENTO
"La realidad es insoportable", ha manifestado Apdha, que ha indicado que 249 personas han perdido la vida en 2017 intentando alcanzar a España, entre ellos Samuel, el niño de cuatro años cuyo cuerpo apareció en enero en las costas de Barbate, y el de su madre, Véronique Nzazi, descubierto en febrero en Argelia.
Además, en este sentido, ha recordado que en los últimos 20 años, más de 6.000 personas han fallecido intentando alcanzar España por la Frontera Sur. No obstante, ha indicado que estos son solo datos que ha logrado contrastar la Apdha, ya que, según la Organización Internacional de las Migraciones (OIM), por cada persona que se ha comprobado que falleció, de otras dos no se supo nunca nada, lo que llevaría a triplicar esta "cifra ya horrible".
El empobrecimiento extremo, la presencia de conflictos armados o la ausencia de futuro empujan a los sectores más jóvenes a la emigración como única alternativa viable, ha advertido Apdha, que ha afirmado que "las políticas migratorias intentan paralizar estos flujos, aunque sea provocando graves violaciones de los derechos humanos".
MÁS DEL 300% EN CÁDIZ
Apdha ha señalado la "significativa" llegada de personas a Andalucía, particularmente a las costas de Cádiz, que con 6.289 personas registra un incremento de más de un 300 por ciento respecto al año pasado.
En este sentido, ha explicado que Marruecos es el principal país de origen de quienes llegan a España, en lo que sin duda "habrá influido la situación de crisis que vive este país desde hace más de un año". A Marruecos, según ha indicado, le sigue Argelia, Guinea, Costa de Marfil, Gambia y Siria, según datos de la OIM.
Igualmente, ha indicado que el balance de 2017 muestra un descenso en el número de mujeres que han migrado hacia España en el último año, relacionado probablemente con el importante incremento de migración procedente del Magreb. No obstante, destaca un aumento de menores en más de un 66 por ciento, "lo que ha evidenciado este año la falta de adecuación de recursos para la protección de los niños que llegan a España".
El Balance Migratorio presentado por Apdha ha destacado, entre los métodos utilizados en los accesos por vía marítima, la recuperación de las antiguas pateras de madera, tanto en el Estrecho como en el mar de Alborán, así como el incremento de motos de agua, especialmente en Ceuta.
No obstante, el uso de embarcaciones de juguete tipo toy e incluso la de tablas de surf, sobre todo por menores, haciendo cada vez más peligrosa la travesía, siguen siendo medios que usan estas personas para intentar llegar a España. En este sentido, Apdha ha incidido en que el empleo de estos métodos "pone en serio riesgo la vida de las personas que no tienen opciones reales de viajar de manera segura por las restricciones de las políticas migratorias".
"La respuesta ilegal e insolidaria que desde España se está dando a los movimientos de población debe cambiar", ha afirmado Apdha, que ha añadido que "concertinas, alambradas, patrulleras, devoluciones, muerte y sufrimiento no pueden seguir siendo la respuesta de este país a las personas que huyen de la guerra o el hambre".