El Ayuntamiento de Jerez (Cádiz) estima en nueve millones los daños ocasionados por la DANA en su zona rural y urbana

JEREZ DE LA FRONTERA (CÁDIZ), 5 (EUROPA PRESS)

La alcaldesa de Jerez de la Frontera (Cádiz), María José García-Pelayo ha estimado en unos nueve millones de euros los daños ocasionados por el paso de la DANA los días 30 y 31 de octubre, donde se produjeron inundaciones de numerosas calles, anegaciones de bajos de viviendas, garajes y locales comerciales, así como en otros edificios municipales y centros educativos.

En declaraciones a los periodistas, la alcaldesa ha asegurado que se ha hecho una valoración "aproximativa" de los daños en la ciudad, porque "evidentemente es muy difícil en 48 horas decir estos son los daños, hay daños que se van a ir evidenciando a lo largo de los próximos días".

Así, ha comentado que en este documento "aproximativo" se han establecido cantidades en torno a los nueve millones de euros en relación a daños tanto en la zona rural como en la zona urbana, daños producidos, como ha enumerado la alcaldesa en bienes públicos, en medio ambiente y en bienes privados, recordando además que hubo "una alteración" en la prestación de servicios, que "evidentemente es un daño también indemnizable", como el servicio de autobuses urbanos que dejaron de circular el día 30.

A esta cantidad estimada se suman los en torno a 25 millones de euros que Asaja Cádiz ha cifrado en cuanto a pérdidas en el sector agricola y ganadero de la campiña de Jerez, de los cuales 16,5 millones se corresponderían a pérdidas económicas, y el resto, 8,5 millones de euros, a daños en infraestructuras.

García-Pelayo ha explicado que elevaría todas estas cantidades a las administraciones competentes --Junta de Andalucía y Gobierno de España-- para obtener ayudas compensatorias que puedan paliar de alguna forma las pérdidas materiales y económicas así como reparar los daños ocasionados por este temporal, que llegó a tener en alerta operativa 1 a su zona rural ante un posible desbordamiento del río Guadalete, y con ello, el desalojo de más de 200 vecinos durante la noche del 31 de octubre.