CÁDIZ 27 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Cádiz ha reprobado este viernes a la exalcaldesa Teófila Martínez (PP) y el portavoz del PP, Ignacio Romaní, por los "insultos" producidos el pasado lunes en la Junta General de la empresa Cádiz 2000, cuando la exalcaldesa llamó hasta 13 veces "cacique" al alcalde, José María González (PCSSP).
La reprobación ha sido llevada a Pleno por vía de urgencia por el equipo de gobierno --Por Cádiz Sí se Puede y Ganar Cádiz Común-- y votada a favor por las dos formaciones que componen el gobierno local, además de por el PSOE. Por su parte, PP votó en contra y Ciudadanos se abstuvo.
La urgencia ha sido defendida por el alcalde, considerando que los hechos acontecidos "no son aceptables, son lamentables". Asimismo, durante su intervención, señaló que "el verdadero objeto es el fondo, y es que no podemos seguir como vamos". "Creo que el lunes rompimos todos los límites y que la exalcaldesa llame 13 veces cacique al alcalde es inaceptable".
Por su parte, el PSOE, que ha apoyado la reprobación por argumentos similares al equipo de gobierno, para intentar así poner remedio al tono de "insultos y descalificaciones". Además, ha recordado que en el año 2004 la exalcaldesa Teófila Martínez reprobó al entonces portavoz del PSOE por descalificar al equipo de gobierno.
Desde el grupo del PP, su portavoz, Ignacio Romaní, insistió en que lo que hizo el alcalde fue "una cacicada" y calificó de "gran cortina de humo" la moción. Además, tras recordar que la concejal de Fiestas en el punto cinco de este mismo Pleno les había llamado "fascistas". Así, tras calificar de "aberración política en el que vale todo", ha instado al alcalde a que "vaya preparando todas las reprobaciones que quiera" porque no se van a callar.
Por su parte, la exalcaldesa Teófila Martínez ha asegurado que no le iban a hacer sentir "ni mejor ni peor por una reprobación, por decir lo que pensaba en ese momento". "No voy a consentir ningún abuso de poder a nadie", ha insistido.
El grupo municipal de Ciudadanos manifestó que las formas empleadas por los ediles del PP "son reprochable, pero de ahí a una propuesta de reprobación no es proporcional", por lo que finalmente se abstuvieron.