CSIF lamenta "la dejadez" del Gobierno con el servicio de vigilancia aduanera y reclama "más medios"

CÁDIZ 9 Jun. (EUROPA PRESS) -

La organización sindical CSIF ha lamentado los sucesos acaecidos en las costas de los Caños de Meca perteneciente al municipio de Barbate (Cádiz), en el que un ocupante de una embarcación recreativa dedicada al narcotráfico y que transportaba 115 kilos de hachís ha fallecido durante una persecución por una patrullera del Servicio de Vigilancia Aduanera (SVA) en la noche del pasado sábado.

El coordinador de Vigilancia Aduanera en el sindicato CSIF y delegado del sindicato en Cádiz, Francisco García, en declaraciones a Europa Press, ha lamentado "la dejadez de la Administración" con los efectivos del SVA y ha reclamado "más medios materiales".

Además, ha incidido en "la necesaria implantación de la profesión de riesgo, tanto para vigilancia aduanera como el resto de colectivos policiales, entre ellos, la Policía Nacional y la Guardia Civil".

Respecto al suceso, y según ha informado el delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, durante la persecución la embarcación perseguida realizó "una serie de acometidas" provocando "varios impactos" contra la patrullera del SVA, cuyos agentes finalmente consiguieron detener y abordar la nave sospechosa de llevar droga. En declaraciones a los periodistas tras ejercer su derecho al voto en Baza (Granada), Fernández ha detallado que uno de los ocupantes de la embarcación quedó dentro herido, mientras que el otro se lanzó al agua intentando huir aunque finalmente pudieron ser detenidos los dos.

Durante el traslado hacia el puerto de Barbate, uno de los accidentados, un tripulante marroquí que no portaba documentación, sufrió una parada cardiorespiratoria sin llegar a ser posible su reanimación. El otro ocupante de la embarcación, de nacionalidad española y con antecedentes por narcotráfico, fue llevado al hospital para ser atendido y recibió el alta, tras lo que fue trasladado a dependencias de la Guardia Civil de Algeciras (Cádiz), donde permanece detenido.

El pasado 9 de febrero dos agentes de la Guardia Civil perdieron la vida cuando fueron arrollados por una narcolancha que se había refugiado del temporal en el puerto de Barbate.