ALGECIRAS (CÁDIZ), 29 Nov. (EUROPA PRESS) -
Abdellah El Haj, conocido como el 'Messi del hachís', el marroquí al frente de la considerada como la mayor organización criminal de tráfico de hachís que opera en España a través del Estrecho de Gibraltar, detenido por la Guardia Civil el martes, ha quedado en libertad tras pagar una fianza de en torno a 100.000 euros, según han informado a Europa Press fuentes de la Guardia Civil.
Como medida dentro de la libertad, Abdellah El Haj tendrá que presentarse a diario en el juzgado, además de haberle sido retirado el pasaporte.
Cabe recordar que el pasado mes de mayo una operación conjunta de la Policía Nacional y de la Guardia Civil permitió asestar un nuevo golpe a la banda de Abdellah El Haj con la detención de 19 personas y la intervención de 13 toneladas de hachís en diez registros en los que también se incautaron tres armas de guerra --fusil de asalto AK 43 con cargador, fusil Cetme con calibre 5.56 y fusil M-16 con calibre 5.56, todo con su correspondiente munición--, tres pistolas de la marca Glock calibre 9 milímetros y una escopeta, según informaron a Europa Press fuentes de la investigación.
Abdellah El Haj, sin embargo, consiguió huir a Marruecos el pasado 17 de marzo. Desde dos meses antes se sabía investigado, pero aún así planeó su asistencia al concierto de un cantante argelino que había programado por la noche en uno de sus locales de ocio, el Shisha Beach sito en la Bahía de Getares de Algeciras.
Fue la última vez que la Policía tuvo ocasión de arrestarlo. El Haj, conocido como 'Messi' por sus continuas publicaciones en las redes sociales de fotos suyas con la camiseta del jugador argentino, llegó a España cruzando el Estrecho en una de sus lanchas. Según detallaron fuentes policiales presentes en el operativo, el seguimiento se llevó hasta el local de ocio en Algeciras, donde varios agentes irrumpieron antes de la actuación musical.
En ese momento, integrantes de su escolta --uno de ellos dijo que "haría lo que fuera" por su jefe-- evitaron su detención, llegando incluso a herir a dos policías con un arma blanca. El Haj huyó en un coche a gran velocidad y, posteriormente, cruzó las aguas del Estrecho en una lancha de vuelta a su Marruecos natal