CÁDIZ 27 May. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Cádiz, José María González, ha alertado contra la gordofobia, "que tiene componentes de odio como el machismo o la homofobia". "Ya está bien de ocultar, como si fuera menor, esa irracionalidad hacia quienes no se ajustan a los cánones impuestos por el sistema, un sistema que no sólo oprime a los pobres, también a quienes no cumplen con sus normas estéticas y sociales", ha añadido.
En un escrito en sus cuentas oficiales de redes sociales, recogidas por Europa Press, el alcalde señala que cuando escribe algún texto en Facebook para fomentar, por ejemplo, el consumo en las tiendas locales, "se repiten comentarios como: Te has hartado de phoskitos en el confinamiento, te has puesto gordo o qué gordo estás, por Dios".
Asimismo, ha lamentado que cuando ha compartido otra noticia en sus redes sociales sobre la necesidad de una reforma fiscal para no castigar a los trabajadores, le escriben: "Tienes unos kilitos de más" o "estás redondo".
"Las bromas siempre son sobre el mismo tema: la obesidad", ha manifestado el alcalde de Cádiz, que ha indicado que tras unos días "dándole vueltas a esta realidad", se ha sentido obligado a posicionarse, "porque haciéndolo quizás pueda ayudar a muchísima gente que seguro se siente reflejado ante esta situación, pero no dice nada".
Así, el alcalde ha hecho referencia a un sociólogo de la Universidad de la Sorbona (París) que desveló al periódico The New York Times los resultados de un estudio, según el cual, en Francia, un hombre gordo tiene tres veces menos de probabilidades de encontrar empleo que otro con su mismo currículo que esté en su peso. "¿Saben por qué? Porque vivimos en una sociedad que margina, excluye, ridiculiza y maltrata a las personas con una característica física que difiera de lo impuesto, en este caso: la gordura", ha explicado el alcalde.
González ha afirmado que "la gordofobia, que si no lo saben es la repulsa hacia quienes sufren exceso de peso y se apartan de los patrones estéticos, tiene consecuencias y tiene componentes de odio, como lo tienen la misoginia, el machismo, la homofobia, la lesbofobia, la transfobia, el racismo, la xenofobia o el clasismo, por poner algunos ejemplos".
Además, ha añadido que "ante las enfermedades de transmisión social, como las antes citadas, sólo queda un camino: combatirlas y nunca normalizarlas o invisibilizarlas".
"Ya está bien de ocultar, como si fuera menor, esa irracionalidad hacia quienes no se ajustan a los cánones impuestos por el sistema, un sistema que no sólo oprime a los pobres, también a quienes no cumplen con sus normas estéticas y sociales. Ya está bien de disfrazar esa exclusión como una cuestión sanitaria. Es mentira", ha aseverado el alcalde de Cádiz, que ha argumentado que "nadie se ha preocupado ni me ha criticado porque fumo más o menos tabaco, por ejemplo, y esa también es una cuestión de salud".
El alcalde ha asegurado que "lo verdaderamente importante" no es cómo se sienta él o si le afecta más o menos, que no lo lleva "nada mal y es muy rara la ocasión" que responde "con la misma dosis de maldad", sino que "la cuestión es que este mismo patrón se repite con todo el mundo, con todo aquel o aquella que ose no cumplir con los estándares de belleza prefijados por la sociedad de consumo".
"Me pregunto cómo lo sufrirán las mujeres, por ejemplo. Para ellas la validez de su persona aún sigue tristemente sujeta al físico, tienen que cargar con una violencia simbólica contra sus cuerpos, unos cuerpos que se han convertido en campos de batalla sobre los que se opina y se juzga bajo un punto de vista absolutamente patriarcal", ha afirmado.
"Si la sufro yo, cómo lo soportarán los niños y las niñas en los patios de nuestros colegios, donde el bulling se ceba con el "gordito", donde la ropa ancha intenta disimular los complejos, donde el insulto despiadado va acompañado de las carcajadas a coros y de una gran carga emocional que los aísla, avergüenza y entristece", se ha preguntado el alcalde, que ha afirmado que lo dice "con conocimiento de causa", porque en algún momento de su vida también le tocó ser ese "gordito" de patio de colegio.
El alcalde ha afirmado que si las críticas sobre su peso van por haber engordado en su etapa como político, "por esa correlación entre buena vida y obesidad, eso también es gordofobia, porque es relacionar el aumento de peso con la pereza, la flojera o la poca actividad".
"Somos diversos en todos los aspectos, y en esa diversidad debemos reconocernos las unas y los otros, la diversidad para ser y para sentir, la diversidad física, sentimental o espiritual", ha manifestado José María González, que ha concluido que "en un mundo en el que la gente vive presa del miedo, la inseguridad, el odio y la exclusión, el amor y la inclusión, aceptar a cada cual como es, intentar mirar más allá, más adentro, se convierten en formas de resistencia frente a la barbarie".