CASTRO DEL RÍO (CÓRDOBA), 9 (EUROPA PRESS)
La localidad de Castro del Río (Córdoba) ha acogido este sábado las Jornadas Cervantinas 'Cervantes: De la cárcel a la gloria. Reflexiones sobre la vida y obra de Miguel de Cervantes', organizadas por la Fundación Cajasol, en colaboración con el Ayuntamiento del municipio y la Universidad de Córdoba (UCO). El evento comenzó el pasado viernes 8 de octubre.
El evento, al que ha asistido Europa Press, se ha iniciado en el Teatro Cervantes a las 12,00 horas, cuando Andrés Trapiello --escritor y Premio de las Letras de la Comunidad de Madrid-- ha abordado en su conferencia 'La traducción del Quijote, un asunto en astillero', en la que ha explicado "los pequeños problemas que tiene la traducción". De este trabajo ha reflexionado que es el trabajo que "más satisfacciones" le ha dado literariamente, porque "ha acercado la obra a muchas personas que querían leerlo, lo intentaban y no podían".
Al hilo de esto, Trapiello ha explicado que traducir 'El Quijote' --tarea en la que ha invertido 14 años de su vida-- le causaba "cierto temor", ya que "iba a ser muy expuesto" porque la obra "es un texto sagrado de la cultura española, tan sagrado que nadie lo toca". También, ha acuñado que "Don Quijote era un hombre del pasado, que había enloquecido leyendo novelas de caballerías", y que así intentó traducirlo.
Así, el premiado autor --experto en Miguel de Cervantes--, ha explicado que "quería hacer una traducción doble", --con 'El Quijote' real y el traducido--, para que "la gente comparara y pudiese ir de un lado a otro". Además, ha asegurado que "hace tiempo" que la obra se dejó de leer como novela para "pasar a estudiarse como texto".
A las 13,00 horas ha sido el turno de la escritora Espido Freire, quien ha ofrecido una visión de las mujeres en la obra de Cervantes, de las que "se ha preguntado si fueron algo más que musas". Concretamente, ha resaltado dentro de la obra y "dentro del ideal caballerés", no se puede entender a Don Quijote "sin Dulcinea", y que "obviamente" también aporta "intriga amorosa y ética".
Sobre el papel de Dulcinea, Freire ha apostillado se quedó "con el corazón prendido en algunos de los momentos en los que nadie entiende qué es lo que está pasando por la cabeza del Quijote". De este modo ha insistido en que "solamente alguien, en algún lugar invisible, distante y presente comprende a Don Quijote, y ese alguien es Dulcinea".
Al hilo de esto, la escritora de éxito ha aseverado que el personaje de Dulcinea "ha surgido precisamente para completar todo aquello que Quijote no encuentra en el mundo". "Da la impresión de que en algún momento ella vendrá a darle ese premio que durante toda su vida ha creído vencer", ha concluido.
De igual manera, Lola Pons --filóloga e historiadora de la lengua y cuyos proyectos de investigación se centran en el paisaje lingüístico y el castellano antiguo-- inaugurará la sesión de la tarde centrándose en la lengua de Don Quijote. Le tomará el relevo el exvicepresidente Alfonso Guerra, a las 19,00 horas, con su conferencia titulada 'Una lectura del Quijote'. El broche final llegará de manos de los actores Juan Echanove y Lucía Quintana, quienes ofrecerán una lectura dramatizada de textos de Cervantes, cerrando así el encuentro.
En este contexto, el presidente de la Fundación Cajasol, Antonio Pulido, ha declarado que "el pueblo de Castro de Río siempre ha estado muy vinculado a la historia cervantina", y por ello, por parte de la fundación "hay una motivación doble y un impulso cultural". Además, ha recordado la creación de la 'Academia Cervantina' del municipio que pretende "tener mucha capacidad con centros escolares y adolescentes, para fomentar la cultura en general y la lectura en particular".
Por su parte, el alcalde del municipio, Julio Criado, ha asegurado que "queda mucho por difundir de la labor que hizo Miguel de Cervantes y su estancia en Castro de Río", y en definitiva "es algo que generación tras generación los castreños han ido transmitiendo", y es que ha aclarado que "sienten" al autor como "algo propio".