HUELVA 6 Sep. (EUROPA PRESS) -
Aníbal Domínguez, hermano y tío de las víctimas del doble crimen de Almonte (Huelva), ha asegurado este miércoles, justo antes del arranque del juicio contra F.J.M., único acusado por los hechos, que su hermano "no tenía ningún tipo de enemigo" y ha dejado claro que "las únicas víctimas" de este suceso son los fallecidos, al tiempo que ha incidido en que la familia está "destrozada".
Así lo ha puesto de manifiesto en declaraciones a los periodistas a las puertas de la Audiencia Provincial de Huelva, donde este miércoles arranca en la Sección Primera con la conformación del jurado popular el juicio por este doble crimen, en el que en abril de 2013 murieron una menor de ocho años y su padre, jornada en la que también se abordarán las cuestiones previas.
F.J.M, es el único acusado por estos hechos y se encuentra en prisión como presunto autor desde junio de 2014, mantenía una relación sentimental con la madre y expareja de los fallecidos cuando ocurrieron los hechos, y se enfrenta a 50 años de prisión.
"Estamos destrozados después de cuatro años tras la pérdida de nuestros seres queridos. Mi hermano era una persona cariñosa, no tenía ningún tipo de enemigo y María era una niña de ocho años, un ser en estado puro, angelical", ha proseguido Aníbal Domínguez.
Por ello, de cara al comienzo del juicio, ha señalado que están "destrozados" por tener que "revivir un episodio tan terrible y que nos ha tocado padecer y sufrir".
No obstante, por otro lado, ha agregado que están "esperanzados" en el posicionamiento de la justicia ya que "hasta ahora ha sido firme, tanto por el desarrollo de la instrucción como por el refrendo de la Audiencia Provincial, del Tribunal Superior de Justicia, sobre la culpabilidad del asesino y en ese sentido lo afrontamos con mucha tranquilidad".
Del mismo modo, ha remarcado que "aquí hay dos únicas víctimas, que son Miguel Ángel y María, y todo aquel que quiera presentar a un presunto criminal de una niña de ocho años como víctima, allá con su conciencia".
"Las únicas víctimas son María y Miguel Ángel, y unos abuelos septuagenarios que han perdido a uno de sus hijos y han perdido a su única nieta", ha continuado. "Los padres del asesino pueden ir a la cárcel a ver a su hijo y mis padres y yo nos tenemos que conformar, desgraciadamente, con ir a ver a mi hermano y mi sobrina al cementerio de Almonte", ha concluido.
"HECHOS, NO SUPOSICIONES"
De otro lado, Gustavo Arduán, abogado de la acusación particular ejercida por la familia del hombre fallecido --padres y hermano--, ha manifestado que están "expectantes y satisfechos" ante el inicio del juicio para que por fin "se debata este horrendo crimen donde tiene que hacerse; en un tribunal de justicia y no en los medios de comunicación".
"Nosotros partimos de la base de que las pruebas son muy claras y contundentes y le vamos a hablar al jurado de hechos no de suposiciones", ha destacado el letrado.
A su juicio, "todo lo que se dijo de las pruebas es lógicamente tergiversación e interpretación de la posición que cada una adopta, negando la realidad de las mismas, pero las pruebas son claras y contundentes".