HUELVA, 19 Nov. (EUROPA PRESS) -
El jurado popular ha declarado este viernes por unanimidad culpable de todos los cargos que se le imputaban, --asesinato, agresión sexual y detención ilegal--, a Bernardo Montoya, el hombre acusado de agredir sexualmente y asesinar en el mes de diciembre de 2018 a Laura Luelmo, la profesora zamorana de 26 años, en la localidad de El Campillo (Huelva).
Tras ello, tanto la Fiscalía como las acusaciones que ejercen la familia y la Junta de Andalucía han mantenido las peticiones de pena realizadas este jueves, toda vez que la acusación particular elevó las penas que solicitaba inicialmente, según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).
De este modo, la Fiscalía había solicitado prisión permanente revisable por el delito de asesinato, 20 años por el delito de detención ilegal y doce por agresión sexual, toda vez que la acusación popular y la particular también solicitaban la prisión permanente revisable.
En el juicio, celebrado a puerta cerrada, Montoya no reconoció los hechos, aunque pidió perdón a la familia de Laura Luelmo tras reconocer que había trasladado el cuerpo de la joven. Esto es lo único que el acusado ha admitido en sus declaraciones tanto en el primer día de juicio como en la última sesión, según informó durante la semana su letrado, Miguel Rivera, ya que se ratificó en su última versión que inculpa a su expareja como la presunta autora del crimen.
De este modo, en declaraciones a los medios a la salida de la cuarta y última sesión, Rivera explicó que había realizado su alegato final siendo "muy parco en palabras" y señaló que todo lo visto a lo largo del juicio había sido "muy inconsistente", así como anunció a los periodistas que recurrirá la sentencia al Tribunal de Justicia de Andalucía (TSJA), ya que entendía que sería desfavorable a su cliente.
Rivera no ha querido hacer declaraciones este viernes a la salida de la Audiencia Provincial de Huelva tras la lectura del veredicto. Sin embargo, Francisco Luelmo, tío de Laura Luelmo y abogado de la familia, ha leído un comunicado en el que ha mostrado el agradecimiento de la familia Luelmo-Hernández a todos los profesionales implicados en el caso y a los vecinos de El Campillo que les ayudaron en tan complicado trance. Estas han sido las únicas declaraciones realizadas por la acusación particular a lo largo del juicio.
Ahora, el magistrado-presidente del juicio tendrá que dictar sentencia contra Bernardo Montoya, una vez tomada la decisión del jurado popular, formado por cinco hombres y cuatro mujeres.
El juicio con jurado popular contra Bernardo Montoya arrancó el pasado lunes, 15 de noviembre, en la Audiencia Provincial de Huelva con sesiones de mañana y tarde a excepción del martes, que solo fue de mañana, y finalizó el jueves después de que todas las partes presentaran sus informes finales y de que el acusado hiciera uso de su derecho constitucional a la última palabra, momento en el que, según su letrado, pidió perdón a la familia de la víctima.
Así, a lo largo de cuatro días han declarado tanto el acusado, --en la primera sesión--, como diversos testigos durante las sesiones de lunes y martes, mientras que el miércoles y el jueves se realizaron las pruebas periciales con la comparecencia de diez médicos forenses, --seis el miércoles y cuatro el jueves--, y de agentes de distintos grupos de la Guardia Civil, entre ellos del Departamento de Escena del Crimen, del Servicio de Criminalística y de la Policía Judicial, así como un psicólogo.
LOS HECHOS Y LA DETENCIÓN
Montoya fue detenido el 18 de diciembre de 2018, apenas un día después del hallazgo del cuerpo de la profesora en la zona conocida como Las Mimbreras a las afueras de El Campillo, localidad donde residía en la misma calle que su presunto asesino. La joven estaba recién llegada a la localidad para impartir clases en el instituto del vecino municipio de Nerva.
La denuncia fue interpuesta por la familia y se activó el correspondiente dispositivo de búsqueda para dar con su paradero, siendo encontrada el día 17 de diciembre de ese año. Un voluntario que participaba en las labores halló prendas de mujer en la zona de Las Mimbreras y la Guardia Civil encontró el cuerpo a unos 200 metros del lugar del hallazgo de las prendas, semioculto en una zona de terraplén y matorrales.
Bernardo Montoya, con graves antecedentes penales como el asesinato de una anciana, confesó el crimen en el interrogatorio policial en un primer momento, pero posteriormente cambió su declaración y desde el 4 de abril de 2019 ha mantenido la versión de que fue su exnovia la presunta responsable de la muerte de la chica. No obstante, hay que recordar que Montoya ha sido el único acusado en esta causa.
El asesinato de esta profesora conmocionó al país ya que fueron masivas las concentraciones de repulsa y las carreras que se convocaron en recuerdo de la joven, que iba con ropa deportiva en el momento de su desaparición el 12 de diciembre de 2018.