Adelante Andalucía defiende una ley que garantice los derechos del alumnado con necesidades específicas de apoyo

MÁLAGA, 6 Oct. (EUROPA PRESS) -

Adelante Andalucía ha defendido la necesidad de una ley que garantice los derechos de los niños con necesidades educativas específicas de apoyo en los centros escolares, una proposición de la que se votará su toma en consideración este miércoles en el Parlamento de Andalucía.

Así lo ha indicado este martes el portavoz de la formación en Málaga, Alejandro Serrato, quien ha explicado que la propuesta "viene a establecer un ratio máximo entre profesionales que atienden al alumnado con diversidad y el número de niños".

Asimismo, como recoge en un comunicado, ha recordado que la conocida como Ley NEAE, que Adelante registró el pasado mes de julio, fue consensuada con las Ampas, los sindicatos CGT y Ustea, Marea Verde, Escuelas de Calor y, a nivel provincial con los colectivos Ampas en pie y Nuestros pequeños guerreros.

En este sentido, el portavoz de Adelante ha pedido el voto favorable del resto de grupo. Al partido socialista, que vote a favor de la admisión a trámite de la propuesta como solicita la comunidad educativa, al tiempo que ha criticado que durante los años que gobernó la Junta el PSOE, "no destinaba los recursos suficientes al alumnado".

A Cs también le ha requerido que haga lo mismo y dé su voto afirmativo "y no sea rehén de un consejero, el señor Imbroda, que pasará a la Historia por ser el más nefasto para la educación pública en Andalucía", por lo que ha exigido al partido "dignidad y valentía política" para asegurar una educación de "calidad".

Del mismo modo, ha considerado que "sería incomprensible" el rechazo de PP, Vox y Cs porque "no tumbarían una ley de Adelante, sino que estarían votando en contra del presente y el futuro de los andaluces".

Así, ha detallado que de aprobarse esta proposición de Ley, cada centro educativo tendría garantizado al menos un orientador, una PTIS, un maestro de audición y lenguaje y otro de educación especial. Además, se establecería un ratio máximo de un maestro de educación especial y otro de audición y lenguaje por cada diez alumnos que requieran esta atención, y una PTIS por cada seis alumnos.

También se garantizaría que el alumnado con discapacidad auditiva tenga intérprete de lengua de signos el cien por cien de la jornada y cada centro tenga un profesional de enfermería, algo que Serrato afirma, son "cuestiones básicas" que aseguran una educación de calidad para todos los niños con necesidades educativas especiales, pero que además "repercuten en la calidad educativa del resto del alumnado", ha concluido.