MÁLAGA 10 Feb. (EUROPA PRESS) -
El exministro socialista Josep Borrell ha opinado este viernes que no cree que el 'brexit', la salida de Reino Unido de la Unión Europea, "vaya a ser un contagio, no creo que otros países quieran hacer lo mismo", más bien, ha dicho, "será una vacuna". "Cuando la gente vea lo complicado que es eso de salirse, las dificultades que tiene... no creo que haya cola por salir", aunque "lo que quizá no haya todavía sea mucha voluntad para continuar".
Sobre otros países, ha apuntado que "el riesgo mayor quizá sean las elecciones francesas", comentando que "es un país que está pasando por una situación política difícil".
Antes de la conferencia, también ha afirmado a los periodistas, donde ha sido cuestionado por la situación del PSOE aunque ha rehusado contestar, que "parece que vivimos momentos difíciles en la Unión Europea, los británicos que se van, Donald Trump --presidente de Estados Unidos-- parece que no tiene mucha vocación europeísta, las relaciones con EEUU han cambiado mucho desde los tiempos de Barack Obama y en muchos estados europeos hay tendencias disgregadoras, como España con Cataluña, pero también Alemania o norte de Italia".
En este punto, y al respecto, ha comentado durante la clausura de las X Jornadas Andaluzas de Enseñanza de la Economía que se han celebrado este viernes, que "parece que los estados tienden a desagregarse y, al mismo tiempo, la propia Unión atraviesa por alguna dificultad".
Borrell, que ha impartido la conferencia 'Europa: ¿entre la integración y la desintegración?' en la Universidad de Málaga (UMA), ha analizado la situación actual en una ponencia con profesores que dan clase de Economía en los institutos, que son "la primera trinchera de la enseñanza de la economía".
Así, ha subrayado la importancia de la economía para entender el mundo en el que vivimos y ha hablado de las organizaciones o instituciones, señalando que "si no hay instituciones nada perdura; hay que crear instituciones que duren", aunque, ha advertido de que en la UE "hay muchas, quizá demasiadas".
UNIÓN EUROPEA, "GRAN INVENTO"
Eso sí, ha defendido que Europa es "un gran invento, a pesar de todo, de las críticas, es un gran invento", ya que, ha explicado, "nos ha traído 70 años de paz". "Hace 70 años que los europeos no nos degollamos los unos a los otros con el entusiasmo con el que lo hacíamos cada dos por tres", ha recordado, al tiempo que ha pedido a los profesores que digan a los alumnos que "Europa es la paz", un "invento genial" de unos hombres que "dijeron que para que la guerra no sea posible nos vamos a unir".
En este punto, Borrell ha dado un repaso de la historia de la Unión Europea desde sus inicios, hasta la integración y la supresión de las fronteras. "Los que no lo vivieron no pueden concebir que eso sea una ventaja, y eso es lo que le pasa hoy en día a los jóvenes europeos, que como no tienen memoria de lo que fue no lo aprecian", ha apostillado.
"Es como la carretera con una curva peligrosa, en la que quitan la curva y ponen una autopista y nadie se acuerda que había una curva peligrosa en la que se mata a gente", ha comparado.
Sobre el camino de la integración también ha incidido en que fue bien hasta 2009 y ha recordado que "los ingleses nunca nos engañaron, los británicos, que ahora se quieren ir, nunca dijeron que querían integrarse". En este sentido, ha añadido que no formaron parte hasta "muy tarde" cuando "vieron que era un invento que funcionaba, que más valía estar dentro que fuera".
Ha continuando afirmando que "ellos no quisieron estar ni en la supresión de fronteras ni en la moneda". "No están nada más que en el mercado, que es lo que les interesa", pero "han empezado a ver que estar en el mercado tiene contrapartidas, que tienen que dejar que vengan los que quieran, y han empezado a pensar que formar parte de la Unión tiene inconvenientes y han decidido marcharse".
Se ha referido a los británicos, que "con la crisis de los inmigrantes, la amenaza terrorista y el emerger de los movimientos populistas en Europa han decidido irse", lo que es un "elemento de desintegración" pero "no es el único" ya que, como ha advertido "hay muchos países que se esconden detrás de los británicos, que no se atreven a decirlo pero estarían encantados de que se limitara la libertad de circulación, pero no lo van a decir, queda feo, pero son comprensivos con los británicos".
"Hay bastante comprensión hacia la posición británica, no hay una negativa rotunda", ha advertido. Otro factor de desintegración que ha citado Borrell ha sido la crisis del euro, reconociendo que hay dudas sobre si esta moneda única ha sido una buena idea o no.
Asimismo, se ha referido a que "hay actitudes que no se corresponden con los valores fundacionales de la Unión Europea". "Hay una desintegración por la parte del valor, de compartir las actitudes", ha comentado.
Por otro lado, ha citado que el contexto geopolítico "ha cambiado totalmente". En este punto, se ha referido al recién elegido presidente de Estados Unidos y ha señalado que "no todo el mundo se enfrenta a Trump dentro de Europa, no lo dicen muy fuerte pero les parece bien lo que dice Trump", lo que agudiza las tendencias disgregadoras. También, ha continuado señalando que en el interior de los estados también hay tendencias disgregadoras, y ha citado el caso de España, entre otros.