Monólogos, lecturas dramatizadas, casting, exposiciones, ensayos y talleres centran la acción durante el primer ejercicio en marcha
MÁLAGA, 9 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Centro de Cultura Activa Pedro Aparicio ha cumplido un año de actividad escénica y expositiva en el que, además de alojar el centro de documentación de los teatros municipales de Málaga, ha acogido a cerca de 5.000 personas que han participado en sus actividades.
Desde su apertura el 8 de enero de 2016 han tenido lugar monólogos teatrales, lecturas dramatizadas de textos americanos y escandinavos, muestras fotográficas, ópera en 'streaming', pequeños 'showcases' en ruedas de prensa, emisiones en vivo de programas nacionales y locales de radio, alguno de ellos con música internacional en directo, conferencias, talleres de tango, fotografía o teatro, ensayos teatrales o las audiciones para escoger los elencos de los primeros montajes de Factoría Echegaray.
De los casi 5.000 visitantes del Centro Pedro Aparicio, 1.353 acudieron a las 44 funciones de 22 espectáculos o actos programados en la Sala Activa, espacio con capacidad para 40 espectadores, y cerca de 3.500 pasaron por las exposiciones, participaron en clases, talleres, audiciones o en las visitas guiadas 'Un paseo por tu teatro', que tras enseñar el Teatro Cervantes recorren ahora sus dependencias (2.000 visitantes en este año).
En el primer apartado figuran los dos ciclos de monólogos Anverso/Reverso y las tres ediciones del ciclo de lecturas Miradores de escena, así como una conferencia del ciclo IV Mujer(es), las retransmisiones de las óperas I puritani y Otello y un espectáculo para escolares del Área de Educación del Ayuntamiento. En el segundo es donde se refleja el carácter polivalente del nuevo espacio, una versatilidad que le permite acoger ruedas de prensa, reuniones, clases de danza o fotografía, ensayos teatrales, audiciones, programas radiofónicos o muestras fotográficas.
Dedicado a la memoria de Aparicio, el alcalde que recuperó para la ciudad el coliseo construido por Gerónimo Cuervo en 1870, el nuevo espacio mostró desde su primer día las tres dimensiones de que consta: ser la memoria del espacio malagueño gracias al Servicio de Archivo, Documentación e Información (SADI), usar sus instalaciones para exposiciones vinculadas al teatro y la cultura (Exposure) y programar actuaciones de vanguardia y pequeño formato (Sala Activa).
EXPOSICIÓN SOBRE EL TEATRO
Precisamente, este martes abre sus puertas en la Sala Exposure del Centro Pedro Aparicio la exposición Festival Internacional de Teatro. 1987-1990, que a través de 28 fotografías, cartelería y un amplio despliegue documental formado por dossieres, programas, localidades, discos, notas, planos escénicos y cartas da fe de la consolidación y carácter internacional de la muestra escénica dirigida en esos años por Miguel Romero Esteo.
Los visitantes podrán contemplar fotos de Bob Wilson, Marcel Marceau, Mathilde Monnier o Wim Vandekeybus, así como de prestigiosas compañías japonesas, polacas, suecas, senegalesas o chinas. Las imágenes y material administrativo de Festival Internacional de Teatro. 1987-1990 reflejan los cambios del encuentro, cuya principal novedad en ese periodo consistió en la utilización del Teatro Cervantes, reinaugurado en abril de 1987, como un nuevo espacio que compartía las representaciones con el Teatro Romano.
La exposición, que permanecerá abierta hasta el 30 de junio, es la segunda de una serie que está mostrando en las paredes y vitrinas de Exposure la historia del Festival cuya 34 edición comenzó este fin de semana con Reina Juana, Piedras preciosas, Hambre y Jajejijojú. Al igual que la primera, Festival Internacional de Teatro. 1983-1986, abierta en enero de 2016 para la inauguración del Centro Pedro Aparicio, está organizada por el Teatro Cervantes y coordinada por Francisco Rodríguez.