MÁLAGA 16 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Provincial de Patrimonio, que preside la delegada territorial de Cultura, Turismo y Deporte de Málaga, ha dado este jueves el visto bueno al proyecto promovido por la Diputación de Málaga para la rehabilitación y adecuación de nuevos usos de la plaza de toros de la Malagueta de Málaga, Bien de Interés Cultural en virtud del Decreto 88/2012, de 17 de abril y monumento histórico-artístico de interés provincial.
Esta autorización ha venido precedida de un trabajo y análisis pormenorizado del monumento en el que la Administración Cultural ha estado vigilante a que el proyecto de conservación propuesto por la Diputación detallara y justificara los procedimientos de actuación ante las patologías del edificio y supusiera una mejora evidente, conservando la transparencia característica del inmueble y el espíritu del proyecto original de Rucoba.
Así, según ha explicado la Junta a través de un comunicado, se ha hecho énfasis en que el proyecto contuviera una separata específica de estudios y analíticas realizadas que reflejara el mal estado de conservación de los elementos cuya demolición se propone, y que justifique su ejecución con base en la mejora del Bien, su estado de agotamiento físico o la eliminación de elementos añadidos inadecuados.
Tras recabarse determinadas subsanaciones del proyecto, Cultura solicitó, además, que se definieran adecuadamente los colores y texturas de los materiales a emplear en la pavimentación y las características de la recogida lineal de aguas y drenaje de las plantas; también los asientos que se proponen sobre el graderío en estas zonas, así como la cerrajería que conforma y complementa las nuevas soluciones previstas.
NUEVOS USOS
En cuanto a los nuevos usos a albergar en el edificio --un centro de arte de la tauromaquia con salas de exposiciones y centro de conferencias y eventos--, esta Administración ha incidido en la necesidad de que los nuevos espacios de exposiciones y muestras se ciñan a lo relacionado con usos culturales y/o artísticos tratando de evitar usos meramente comerciales.
Al respecto, también se ha exigido que el restaurante-cafetería describiera la oferta y calidad del mismo, y los espacios a ocupar, limitando su alcance al espacio cerrado, sin extensión a las zonas abiertas de terradillo del tendido bajo.
En todo momento, asimismo, han precisado que se ha tenido presente que estos nuevos espacios y usos resultaran compatibles con el uso taurino y con la tipología de monumento de que goza el inmueble, precisando que en caso de modificarse estos aspectos, deberá solicitarse autorización para estas modificaciones.
No obstante, esta autorización no abarca aún el proyecto el diseño museográfico de la exposición permanente, que deberá ser objeto de un estudio posterior, aunque indica unas pautas, como el respeto y puesta en valor del edificio contenedor, la óptima contemplación y conservación de las piezas originales, y la máxima puesta en valor de la iconografía taurina junto con el carácter didáctico de la propuesta.
Por último, han precisado que queda también pendiente en relación con la cafetería restaurante las características de su mobiliario, dado que esta definición será objeto de una concesión, que antes de su adjudicación deberá contar con la autorización de esta administración cultural.
En este sentido, sí se ha precisado, en todo caso, que el tipo de establecimiento a implantar podrá ser versátil pero en ningún caso franquicias o cadenas de comida rápida o similar.