Asegura que se exigen marcas inferiores a las competiciones para alumnos de la ESO
MÁLAGA, 17 Oct. (EUROPA PRESS) -
El grupo de Ciudadanos en la Diputación de Málaga ha criticado la poca exigencia de las pruebas físicas para consolidar las plazas de bomberos de la Diputación de Málaga, en las que se piden "marcas inferiores" a las competiciones para alumnos de Enseñanza Secundaria Obligatoria (ESO).
Así, los diputados provinciales de la formación naranja presentarán una moción al próximo pleno en la que instarán al equipo de gobierno del PP a que las pruebas del proceso de consolidación previsto para los más de 200 bomberos interinos de la provincia cumplan con principios que garanticen la eficacia del servicio.
Las bases publicadas el pasado mes de julio para cubrir algunas de estas plazas rebajan la exigencia de las pruebas físicas "de forma extraordinaria", hasta considerar aptos ejercicios en los que los candidatos lleven a cabo una única flexión. Las marcas que se solicitan son, en ocasiones, inferiores a las que se exigen en competiciones de alumnos de ESO, han recalcado en un comunicado.
Los bomberos interinos que deseen consolidar su plaza deberán, de acuerdo a las bases publicadas el pasado mes de julio, acreditar su aptitud física sólo en tres de los seis ejercicios de los que consta el examen, del que, además, se han retirado las pruebas de natación, que sí estaban en las bases para la consolidación de empleo publicadas por el consorcio en 2011.
En este caso, las marcas fijadas en las bases para ser declarado 'apto' en las pruebas físicas "son mínimas", con lo que todos los candidatos las superarán con facilidad y la balanza se decantará en función de la antigüedad de los aspirantes, han explicado.
Entre las curiosidades de esta nueva oferta pública de empleo, publicada en el Boletín Oficial de la Provincia el pasado 6 de julio, figura el pago de apenas nueve euros por los derechos de examen, cuando en 2011 se exigían tasas que oscilaban entre los 60 y los 90 euros.
Además, en pruebas como el salto de longitud se han rebajado las marcas a obtener entre 30 y 40 centímetros; la carrera de 100 metros que se pedía en 2011 se ha transformado ahora en otra de sólo 50 metros, que en algunos casos, y según la edad de los bomberos candidatos, los aspirantes pueden recorrer incluso en 12 segundos, cuando para los niños de la ESO se exigen marcas en torno a los nueve segundos.
En la prueba de resistencia de 1.000 metros se permitirá además a los aspirantes de más de 49 años llegar una media de 45 segundos más tarde que a los candidatos de 2011. En la prueba de levantamiento de peso los aspirantes de 2016 tendrán que elevar el peso sólo en dos ocasiones, cuando en 2011 el tribunal exigía entre cuatro y siete repeticiones, que contabilizaba en voz alta.