Analizan la situación en Siria y abogan por "buscar los orígenes de estos problemas", pues "de otra forma no hallaremos la solución"
MÁLAGA, 20 Oct. (EUROPA PRESS) -
Un mayor esfuerzo en cooperación y desarrollo con los países emisores de inmigrantes, así como una revisión de la política migratoria porque ésta "no puede estar basada sólo en el blindaje de las fronteras" son algunas de las conclusiones a las que se ha llegado este lunes en la VII reunión de los representantes del Comité de Asuntos Económicos, Sociales y Territoriales (Ecoter) de la Asamblea Regional y Local Euromediteránea (Arlem).
El encuentro, que se ha producido en el Palacio de Ferias y Congresos de Málaga (Fycma), ha contado con la presencia de medio centenar de líderes locales y regionales de 24 países europeos, africanos y asiáticos y ha sido presidido por el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, y el copresidente de Arlem y alcalde de Antioquía (Turquía), Lütfü Savas.
Estos ponentes han debatido sobre la inmigración y sus políticas y han acordado una serie de resoluciones recogidas en un informe de cara a la próxima convocatoria, que tendrá lugar el 10 de noviembre en Luxor (Egipto). Entre estas conclusiones, también destaca el pensamiento común de que la migración tiene que producirse de forma regular.
El alcalde de Málaga ha puesto a la capital malagueña como ejemplo de urbe "que trabaja bien los temas de acogida y convivencia de los inmigrantes, buscando mecanismos de inclusión, de encuentro y de diálogo". Málaga cuenta con unos 50.000 inmigrantes provenientes de 140 países, según ha resaltado.
Por su parte, el regidor de Lisboa, Antonio Costa, que ha sido el ponente sobre la gestión de la migración en el Mediterráneo, ha asegurado que la inmigración es un fenómeno estructural del Mediterráneo, ya que "los movimientos han sido permanentes durante toda la historia". Lo que ha destacado es que la inmigración debe ser un fenómeno enriquecedor tanto para el país de origen como de destino.
También ha señalado el papel fundamental que tienen las ciudades en los flujos migratorios, puesto que estos "no se producen tanto entre países, sino entre ciudades". Así, para Costa "el respaldo a las comunidades locales es esencial y necesario", por lo que ha apelado a la Unión Europea y a Arlem a que implementen la importancia que las ciudades poseen en esta política.
Tanto Costa como De la Torre han coincidido en que la política de inmigración no solo tiene que ser de "cierre de fronteras"; para el alcalde de Málaga resulta indispensable "crear mecanismos de inmigración regular, que junto a la educación y a la formación en los países de origen, puedan facilitar posteriormente la inserción laboral".
Por su parte, el regidor lisboeta también ha apostado por esta vía como instrumento para luchar contra las redes de tráfico de personas. "La política de inmigración tiene que ser de ayuda al desarrollo, de la paz y del fomento de la democracia; solo de un modo integrado podemos gestionar la inmigración en el Mediterráneo", ha señalado.
SITUACIÓN SIRIA
Otra de las resoluciones del encuentro ha sido establecer una distinción entre refugiados por crisis humanitarias y los migrantes por razones económicas. Sobre la mesa ha estado presente la situación en Siria e Irak y sus consecuencias para los países vecinos.
El alcalde de Antioquia y copresidente de Arlem, Lüftü Savas, ha destacado que en el último mes unas 200.000 personas han cruzado la frontera turca y que en los tres años de conflicto en la región se calcula que tres millones de personas han tenido que abandonar su país.
La mayor parte de esta "migración forzosa" ha recalado en países vecinos, especialmente Turquía, Jordania y El Líbano. Savas ha calificado el problema de "drama humanitario" y ha asegurado que "es muy difícil enfrentarse y superar la situación solo con los recursos de un solo país o varios estados, ya que se trata de un problema internacional".
Costa también ha lamentado de la "situación dramática" que viven miles de personas: "Se ha levantado un campo de refugiados con capacidad para 300.000 personas; eso no es un campo de refugiados, es una ciudad", ha dicho.
Para el alcalde de Antioquia, la solución del conflicto se consigue "enfocándonos en las causas", puesto que "hay que buscar los orígenes de estos problemas, de otra forma no hallaremos la solución".
Por ello, ha valorado que los proyectos de Ecoter van a ayudar a estrechar las relaciones entre los países del norte y del sur de la cuenca mediterránea, disminuyendo las diferencias e incrementando a su vez la cooperación.