MÁLAGA 6 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil y la Udyco de la Policía Nacional intervinieron en 2017 unas 54,2 toneladas de sustancias estupefacientes en Málaga, según los datos facilitados por la Subdelegación del Gobierno; una cifra que supone un descenso respecto a la cantidad incautada el año anterior, que fue de unas 58,5 toneladas.
Así se indica en las cifras recopiladas por la Subdelegación hasta el 30 de noviembre, a las que ha tenido acceso Europa Press, en las que se precisa que en concreto la Guardia Civil intervino 31,6 toneladas de hachís y 951 kilos de marihuana; mientras que los efectivos de la Udyco de la Policía Nacional se incautaron de 19,1 toneladas y casi 658 kilos de dichas sustancias, respectivamente.
En cuanto a la cocaína, fueron 20 kilos los intervenidos por la Guardia Civil y 1,78 toneladas por la Udyco, haciendo un total de 1,8 toneladas en 2017, lo que supone un ligero incremento respecto a 2016, cuando los agentes se incautaron de 1,18 toneladas. Ambos cuerpos se incautaron de otras sustancias, como éxtasis, con unos 52 kilos.
En lo que respecta a los detenidos en relación con el tráfico de drogas, un total de 2.165 personas fueron arrestadas por la Guardia Civil; mientras que 386 lo fueron por la Udyco, según los datos facilitados por la Subdelegación; haciendo un total de 2.551 detenidos, cifra superior también a la de 2016, con 2.423 arrestados.
Además, la Udyco atendió 51 órdenes europeas de extradición y 17 comisiones rogatorias. Asimismo, se intervinieron algo más de 767.000 euros en efectivo, 131 vehículos, tres embarcaciones, 17 armas de fuego, siete armas de gas o aire comprimido, más de 250 teléfonos móviles, explosivos y otros objetos. El Valor de las intervenciones por blanqueo ascendió a 3,88 millones de euros.
Por otro lado, tanto la Guardia Civil como la Policía Nacional se han incautado de 427,3 gramos de sustancias estupefacientes en centros educativos en 2017, lo que supone un descenso respecto al año anterior en el que se intervinieron 788,4 gramos. El número de detenidos en este ámbito también descendió hasta cinco, frente a los nueve arrestados en 2016.