MÁLAGA 19 Jun. (EUROPA PRESS) -
HM Hospitales ha incorporado al servicio de Cirugía General y Aparato Digestivo el tratamiento endoscópico del quiste pilonidal (EPSiT), una innovadora técnica endoscópica que permite tratar sinus o quiste pilonidal a través de una cirugía mínimamente invasiva y con un posoperatorio mucho más rápido para el paciente respecto a la cirugía tradicional.
Así lo ha destacado el centro en una nota, en la que ha subrayado su compromiso "con la innovación y la excelencia en la atención médica en la provincia de Málaga". El quiste pilonidal, que afecta mayoritariamente a personas de entre la segunda y tercera década de vida, es una acumulación anormal de tejido cerca del coxis. "Estos quistes pueden variar en tamaño y, en algunos casos, pueden causar inflamación crónica, dolor y desarrollar infecciones recurrentes", explica el jefe de servicio de Cirugía General y Aparato Digestivo en HM Málaga, el doctor Antonio González.
"Esta técnica permite mejorar la calidad de vida del paciente al tratarse de un procedimiento mínimamente invasivo, que es dado de alta pasadas menos de seis horas de la intervención", señala el cirujano. Por parte del centro, se detalla que esta técnica ya se ha llevado a cabo en varios pacientes en el Hospital Internacional HM Santa Elena (Torremolinos), y ha destacado que, a diferencia de la cirugía tradicional, esta presenta "grandes ventajas" para el paciente. Sin necesidad de ingreso, se realiza mediante un dispositivo que contiene una cámara, dejando una herida de muy pocos milímetros que precisa sencillas curas.
El doctor José María Benavente, director territorial sur de HM Hospitales, ha asegurado que, "en HM Hospitales, creemos que la innovación en el tratamiento médico es fundamental para proporcionar una atención de alta calidad. La introducción de esta técnica es un paso adelante en nuestra continua búsqueda de la excelencia y nos permite garantizar la máxima seguridad, así como mejorar la calidad de vida de nuestros pacientes".
Según ha explicado el centro, el procedimiento consiste en introducir una pequeña cámara de televisión por el trayecto del sinus, y se eliminan con unas pequeñas pinzas los vellos acumulados. A continuación, se cepillan sus paredes y se coagulan con un pequeño electrodo. Quedan habitualmente dos pequeñas heridas abiertas, que corresponden a los orificios de entrada y salida, que en pocos días terminan de curar. Lo ideal es complementar el tratamiento con la depilación definitiva de la zona.