Metro en superficie hacia el Hospital Civil Eugenio Gross y Blas de Lezo
EUROPA PRESS/JUNTA ANDALUCÍA
Actualizado: jueves, 25 mayo 2017 15:07

SEVILLA/MÁLAGA 25 May. (EUROPA PRESS) -

El consejero de Fomento, Felipe López, ha asegurado, en relación con el tramo en superficie al Civil del metro de Málaga, que "cuando todo el mundo va en la dirección contraria salvo el alcalde, Francisco de la Torre, sería bueno que se replanteara si el que está equivocado es él", y ha considerado que "no puede haber volantazos, cambios de humor o de opinión de un día hacia otro" en un proyecto que, ha dicho, representa la "modernización de la ciudad".

Así ha contestado López en el Parlamento andaluz, a la pregunta formulada por la parlamentaria del grupo socialista por Málaga Marisa Bustinduy, sobre qué le parece la actitud del equipo de gobierno sobre la prolongación de la Línea 2 entre Guadalmedina y Hospital Civil, refiriéndose a la moción llevada este jueves al pleno de Málaga por parte del grupo municipal del PP.

López ha recordado que el Consejo de Gobierno tomó la decisión de declarar el interés metropolitano del trazado al Civil "y lo estamos haciendo porque pensamos que las instituciones cuando firman libremente acuerdos y pactos lo que deben hacer es cumplirlos y esto es lo que estamos reclamando al Ayuntamiento de Málaga", en referencia a lo suscrito en 2013, con el fin de que se culmine la red de metro tal como se había planteado en los acuerdos.

"El metro no es un proyecto impuesto por la Junta al Ayuntamiento, sino que se inicia con el acuerdo de éste", ha recordado, reiterando que "lo que le estamos pidiendo al Ayuntamiento es que sea serio, que se comprometen las instituciones y las personas que las representan, y no puede haber volantazos, cambios de humor o de opinión de un día hacia otro, porque al final lo que estamos trasladando es un mensaje demoledor sobre la credibilidad de las instituciones".

Ha considerado que en este proyecto, "lamentablemente, y califico comportamientos, no a personas, sobra regate en corto y falta altura de miras, porque estamos ante un gran proyecto no sólo desde el punto de vista de la inversión, sino que representa la modernización de la ciudad", ya que, ha dicho, "estamos hablando de avanzar en la mejora de la calidad del aire, de reducir tiempo de desplazamiento, construir a evitar emisiones sobre cambio climático".

López ha indicado que la mayoría del Ayuntamiento "parece que tiene otro criterio ya", apuntando que "cuando todo el mundo va en la dirección contraria salvo el alcalde, sería bueno que se replanteara si el que está equivocado es él, porque pasamos de una cosa a otra, buscando siempre pretextos para no acabar haciendo lo fundamental, que es cumplir la palabra dada y cuando la palabra dada representa tener compromisos con terceros, con mucho más razón".

López ha explicado que "la frontera que la Junta está estableciendo como límite de su actuación es en primer lugar el principio de legalidad". "Y el Ayuntamiento está poniendo cosas en lo alto de la mesa que no pueden ser aceptadas porque en ningún caso respetan la legalidad", ha apuntado.

Así, ha indicado que "una de ellas es el llamado metrobús, que el alcalde de forma intencionada le ha puesto la palabra bus metro para que fonéticamente pueda inducir a cierta confusión" y ha recordado que eso "en la doctrina de la Unión Europea y España es una modificación sustancial del contrato y no se puede hacer".

La otra frontera, ha dicho, "es la de la razón", señalando que "estamos hablando de que es un proyecto bien concebido, que representa una gran oportunidad para el conjunto de la ciudad, y ahí están las valoraciones de los ciudadanos, y que va a generar empleos".

La declaración de interés metropolitano constituye el paso previo a la licitación de esta obra, cuyo proyecto constructivo se culminó en abril de 2016, con su remisión al Ayuntamiento de Málaga para la audiencia sobre la adecuación al planeamiento urbano, según han informado desde la Junta en un comunicado.

Este tramo, que tiene una solución mixta de trazado, con un tercio del recorrido soterrado, y los otros dos tercios con plataforma reservada en superficie, consta de 1,8 kilómetros y cuatro paradas. El presupuesto de inversión previsto es de 41 millones de euros, con un plazo de 24 meses de ejecución, y la aportación de viajeros previsto a la red de metro es de 2,5 millones de pasajeros anuales.

Este ramal permite sumar el cuarto distrito más poblado de la capital, Bailén-Miraflores, a la red de metro, que da cobertura a los otros tres distritos más habitados, como son Carretera de Cádiz, Cruz de Humilladero y distrito centro, así como la zona de Teatinos, que alberga los principales equipamientos de interés supramunicipal, como la Universidad, la Ciudad de la Justicia, o el Hospital Clínico, entre otros.

Finalmente, a este avance con la declaración de interés metropolitano del ramal hasta el Hospital Civil, hay que sumar la inminente licitación, prevista en junio, de las obras de terminación del tramo entre Renfe y Guadalmedina, que conecta el intercambiador de El Perchel, donde confluyen las líneas en servicio, con la avenida de Andalucía, antesala del centro histórico de la capital, donde la Consejería de Fomento y Vivienda avanza en la ejecución del tramo Guadalmedina-Atarazanas.

Una vez que el Consejo Consultivo de Andalucía ha emitido su dictamen favorable al expediente de resolución del contrato en vigor de dicho tramo, hecho que ocurrió la semana pasada, sólo resta la ratificación por Consejo de Gobierno de dicha rescisión, para poder licitar en junio las obras de terminación, por un importe de 24,75 millones de euros.

Por su parte, la parlamentaria socialista ha indicado que el Gobierno andaluz "ha dado respuesta a la solución consensuada entre Ayuntamiento y Junta", apuntando que "cuando las administraciones alcanzan acuerdos y consensos como sucedió en noviembre de 2013 tras una larga negociación, que incluyó a los agentes socioenómicos, hay que cumplirlos".

En este sentido, Bustinduy ha indicado que "no parece procedente volver a retroceder dado que el interés general debe imperar y éste no es otro que dar la máxima utilidad a la red del metro en Málaga, una intervención que va a permitir llegar a los distritos más poblados y extender este servicio tan bien acogido al máximo de la población".