MÁLAGA 29 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Juzgado de Instrucción número 10 de Málaga ha dado por concluido pero sin procesar a nadie el sumario en el que se investigaba la muerte de dos colombianos en 2009 en la finca de la localidad malagueña de Alhaurín de la Torre, en la que un año antes fue hallada muerta Lucía Garrido, hechos por los que se sigue otra causa.
Así, la jueza no encuentra indicios suficientes para procesar a alguna de las cuatro personas que han sido investigadas en esta causa, aunque acuerda remitir el sumario, junto con las piezas separadas correspondientes, si las hubiere, a la Audiencia Provincial, emplazando allí a las partes, según consta en el auto, al que ha tenido acceso Europa Press.
Este caso se inició primero por la muerte de esos dos hombres en abril de 2009, por lo que fue investigado el exmarido de Lucía Garrido; y posteriormente, se ampliaron las diligencias por un delito de inducción al homicidio --siendo el anterior la supuesta víctima-- en grado de tentativa, citando como investigados a tres hombres, que también lo están en la causa de la muerte de la mujer.
La jueza señala que de las diligencias practicadas "se desprende que no aparecen indicios racionales de criminalidad contra persona determinada", por lo que considera "procedente concluir este sumario sin procesamiento alguno" y ello, según las razones expuestas por el ministerio fiscal; aunque remite las diligencias a la Audiencia Provincial.
Esta causa ya se había archivado en su momento y ahora la instructora señala que, como ya se sostuvo entonces, de lo investigado no se desprendía la comisión de dos delitos de homicidio, al quedar acreditado que el exmarido de Garrido, M.A.H., causó la muerte a los dos hombres pero "amparado por su derecho a la legítima defensa".
Y ello porque los dos hombres que resultaron fallecidos, recuerda el auto, fueron a la vivienda "con la cara tapada y portando armas", que, además, dispararon en siete ocasiones, respondiendo el otro con dos disparos.
En la resolución se precisa que la causa por la que se reabrieron las diligencias fue al recibirse un atestado de la Guardia Civil donde constaban declaraciones de testigos protegidos, quienes decían que el motivo del asalto "era el robo de cocaína" y que el hombre al conocer lo que iba a pasar se posicionó en un lugar "adecuado para abatirles" y se deshizo de la droga.
Pero la instructora indica que de las diligencias practicadas "no se desprende la existencia de indicios suficientes de que los hechos sucedieran tal y como se hizo constar en el informe que determinó la reapertura de las diligencias". Añade que no hay pruebas de que hubiera droga en la finca o de que el hombre se la llevara.
Asimismo, respecto a la investigación sobre los otros tres hombres por inducir al asalto para causar la muerte al anterior --M.A.H.-- y apoderarse de la droga, en el auto se señala que "de lo actuado tampoco se desprende la existencia de indicios bastantes de que ello sea así".
Se apunta que los testigos dicen que "se concertaron para robar en la vivienda", delito que estaría prescrito, pues las actuaciones se reabrieron en junio de 2015 y los hechos y ese supuesto concierto entre los investigados sería en abril de 2009, "habiendo transcurrido con exceso el plazo de cinco años de prescripción".