Málaga pone en marcha un plan para detectar y prevenir la radicalización, que prevé desarrollar 245 acciones

Se interviene con las personas que caen en estas conductas como víctimas, situándose la ciudad como pionera en el ámbito local

MÁLAGA, 9 Jun. (EUROPA PRESS) -

El Ayuntamiento de Málaga ha articulado su primer Plan Transversal por la Convivencia y contra la Radicalización Violenta, con el que se pretende detectar y prevenir este tipo de comportamientos en todos sus ámbitos, no sólo el yihadismo; considerando que las personas que caen en estas conductas son víctimas. Se estructura en nueve ejes, que prevén el desarrollo de 245 acciones y medidas concretas.

El alcalde, Francisco de la Torre, y el rector de la Universidad de Málaga (UMA), institución que ha colaborado en el plan, José Ángel Narváez, han presentado este plan y han incidido en el convenio de colaboración suscrito para actividades académicas y formativas dentro de este plan y dotar con ello con un soporte científico a las acciones que contempla.

Este plan, que estructura y da forma a un trabajo que se "viene realizando desde hace años", ha indicado De la Torre, tiene como finalidad sensibilizar y construir una ciudadanía resiliente que favorezca la cohesión social, mejore la convivencia, respete la libertad religiosa y de culto y evite la marginalización y el radicalismo violento.

El regidor ha explicado que desde hace 20 años "se viene trabajando desde el Ayuntamiento en esta política de integración, normalización de la población inmigrante, así como en la atención a estas personas", en colaboración con las asociaciones, porque "hemos comprendido siempre que la integración desde otros países debe hacerse desde el respeto mutuo".

Ha apuntado que a esta labor ahora se incorporan determinados contenidos "en la medida en que hay más población inmigrante y pueden surgir situaciones más propensas de radicalización".

El concejal de Derechos Sociales, Julio Andrade, ha explicado que se ha creado una oficina dentro del Área de Servicios Sociales de coordinación interna con asociaciones donde se pueden poner en conocimiento posibles situaciones de radicalización y ha incidido en que las personas que han caído en estas conductas serán tratadas "como víctimas", interviniendo para que puedan "desengancharse".

Ha apuntado que hay 15 estrategias para abordar los diferentes casos, porque "poniendo el símil de la droga, cuando alguien está enganchado es distinta la actuación según los casos". "Pasa igual en estos procesos, habrá elementos comunes, pero hay situaciones individuales", ha apuntado.

Andrade ha manifestado que ni en España ni a nivel internacional "conocemos estrategias locales de este tipo" como la realizada en Málaga capital, "y va a servir de ejemplo" a otros lugares, recordando la reciente presentación a la Universidad Metropolitana de Nueva York.

Para la elaboración y puesta en marcha se ha trabajado conjuntamente con el Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (Citco) del Ministerio del Interior y es consecuencia directa de que Málaga haya sido elegida por el Gobierno de España como ciudad piloto para la implementación del Plan Estratégico Nacional de Lucha contra la Radicalización Violenta.

Desde un enfoque social, se fijan dos objetivos principales, como es el desarrollo de estrategias transversales de prevención de la radicalización violenta y el poder expandir las buenas prácticas y conseguir objetivos conjuntos de interculturalidad, tolerancia, respeto religioso o respeto a las diferencias y creencias.

El plan se estructura en nueve ejes, como son prevención e intervención programada, actuaciones y cooperación institucionales; sensibilización y formación; igualdad entre géneros y promoción de las mujeres en el ámbito social, cultural, sanitario y productivo; mediación social e intercultural; gestión de la convivencia, diversidad religiosa y multicultural; educación y desarrollo de actitudes y aptitudes en menores y jóvenes; comunicación estratégica en Internet y redes sociales; e investigación y análisis.

En este sentido, por el momento se considera prioritario trabajar en la prevención e intervención programada, actuaciones y cooperación institucionales; en la sensibilización y formación; así como en la mediación social; aspectos sobre los cuales se desarrollarán posteriormente las medidas contempladas.

Hasta ahora se han creado cuatro órganos de trabajo, como son la Agrupación de desarrollo para el Fomento de la Convivencia y la Prevención de la Radicalización Violenta, constituida en abril y que permite el trabajo en red, agrupando a los agentes implicados en esta materia.

Ya forman parte la Asociación Codenaf, Asociación marroquí para la integración de los inmigrantes, Asociación Mujer emancipada, Asociación Incide, Málaga Acoge, Accem, Federación de Asociación de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Transexuales-Andalucía diversidad, Asociación Prodiversa, Movimiento contra la Intolerancia, Cruz Roja y Cáritas.

En cuanto al grupo local, también creado en abril, está encabezado por Andrade y aglutina a las Áreas de Seguridad y Derechos Sociales; mientras que la Mesa Técnica de Prevención de la Radicalización Violenta, está integrada por profesionales del Área de Derechos Sociales. El consejo asesor lo forma un grupo de expertos y personal del Foro por la Paz en el Mediterráneo.

Asimismo, este viernes se ha constituido la comisión de seguimiento del Plan en la que participan representantes de la Universidad de Málaga y profesionales del Área de Derechos Sociales.

CONVENIO CON LA UNIVERSIDAD DE MÁLAGA

Tanto el Ayuntamiento como la Universidad de Málaga han expresado su convencimiento de la necesidad de aunar esfuerzos para el desarrollo de líneas de prevención e investigación que permitan profundizar en el conocimiento de la realidad de Málaga.

Estas acciones preventivas se dirigen a evitar que las personas se unan al terrorismo, trabajando para ello sobre los factores o causas profundas que derivan en la radicalización violenta y el reclutamiento.

Al respecto, el rector ha indicado que los últimos sucesos de Londres "representan la necesidad de que la sociedad civil reaccione pero de una forma coordinada y pacífica", destacando la relación "fructífera" con el Ayuntamiento para "dar respuesta a las demandas y los retos de la sociedad".