MÁLAGA 24 Feb. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del PSOE en la Diputación de Málaga, Francisco Conejo, ha exigido al equipo de gobierno del PP que muestre la auditoría higiénico-sanitaria realizada el pasado mes de septiembre en la cocina del centro de discapacitados psíquicos Guadalmedina, situado en la capital. Además, ha criticado el "lavado de cara" y que se quieran "tapar las vergüenzas" de estas instalaciones "con un poco de pintura y unas colchas".
En rueda de prensa junto a la diputada provincial socialista Antonia García, Conejo ha solicitado una vista del expediente y una copia de esta auditoría, asegurando que "si tan seguro" está el equipo de gobierno 'popular' de que se cumple la normativa de higiene y salud "estoy convencido de que no van a tardar ni un minuto en facilitar esa auditoría a este grupo".
"Si no tienen nada que esconder, si el centro está en perfecto estado como defienden, les pido que enseñen la auditoría de la cocina del centro hoy mismo", ha manifestado, al tiempo que ha pedido también al PP que haga públicas, tal y como solicitó por escrito este jueves el grupo socialista, las comunicaciones remitidas por la supervisión del centro a los servicios centrales de la Diputación sobre el estado de conservación y mantenimiento del inmueble, las necesidades de equipamiento e inversión, la política de personal --bajas, sustituciones, nuevas contrataciones, etcétera--.
El dirigente del PSOE también ha arremetido contra el presidente de la Diputación, Elías Bendodo, y la diputada responsable de Servicios Sociales, Lourdes Burgos, por considerar "normal" la situación en la que se encontraba el centro tras la visita de los diputados socialistas el miércoles.
Entonces, criticaron que había heces en el techo de la habitación de un usuario, humedades, óxido en la cocina, camas "en un estado lamentable", ventanas y persianas rotas, mobiliario "antiguo y en pésimo estado e incluso una cucaracha en el comedor".
Ha insistido en que con "chapuzas y un lavado de cara" no se arreglan "las graves deficiencias que tiene el centro de discapacitados psíquicos Guadalmedina". En este sentido, ha indicado que el PSOE ha reclamado "un plan de choque urgente, una reforma integral del edificio, un cambio en profundidad, una renovación del equipamiento y que se dote del personal necesario al centro".
"Con una mano de pintura no se solucionan las heces en el techo, las humedades, el óxido, las camas, ventanas y persianas rotas, las cucarachas y la falta de personal", ha espetado Conejo, quien ha vuelto a criticar que la Diputación siga adelante con el proyecto de rehabilitación de la plaza de toros de La Malagueta y ha demandado que los cuatro millones previstos en ello se destinen a otras actuaciones.
El portavoz socialista ha considerado que la Diputación no se puede permitir que los centros asistenciales que dependen de la institución estén en ese estado, incidiendo en que hay que ejecutar un plan que incluya una reforma integral y más personal.
En este punto, ha defendido a los empleados del centro Guadalmedina: "son unos magníficos profesionales. Atienden con mimo a las personas discapacitadas; el problema no es la atención de los empleados a los usuarios sino que Bendodo prefiere destinar los recursos de la Diputación a los toros en lugar de a las personas con discapacidad".
CRÍTICAS A BENDODO
Ha criticado Conejo que el presidente de la institución diga que los centros sociales "son competencia de la Junta", añadiendo que a Bendodo "sólo le gustan las competencias que le dan fotos". "A Bendodo lo verán en la plaza de toros presentando un restaurante, en San Sebastián impulsando una escuela de hostelería privada o en Pensacola, EEUU, vendiendo la figura de Bernardo de Gálvez", ha sostenido.
Según el dirigente del PSOE, donde "jamás verán" al presidente de la institución provincial es "visitando a los mayores de la residencia de Colmenar, porque la cerró, tampoco lo verán visitando la Escuela de Enfermería, porque también la cerró, o en un pequeño municipio de la provincia presentando un plan de empleo, porque seis años después de llegar a la Diputación se niega a ponerlo en marcha".
En su opinión, el estado del centro Guadalmedina "es el fiel reflejo de las políticas que Bendodo viene aplicando desde que gobierna Diputación: fijación por desmontar los servicios públicos y dejadez e insensibilidad hacia las personas".
Por su parte, la diputada provincial del PSOE Antonia García ha denunciado "la dejadez de responsabilidades y la pésima gestión del PP" que ha sumido a este centro "en el mayor de los abandonos". Un centro que, ha recordado, acoge y presta servicio a 35 discapacitados psíquicos gravemente afectados y con problemas de conducta.
García ha recordado que los usuarios en muchos casos ya no tienen familia y es la Diputación "la única familia que les queda", por eso ha criticado "la insensibilidad y falta de humanidad de la actual Diputación gobernada por el PP". Asimismo, ha denunciado la falta de personal, ya que, ha explicado, "hay once plazas de auxiliares de clínica sin cubrir, lo que lleva al resto de auxiliares a realizar turnos de 15 e incluso 25 horas".
El puesto del fisioterapeuta, ha continuado García, "lleva sin cubrirse desde el mes de noviembre y los puestos de la psicóloga y la trabajadora social han estado más de un año sin cubrir y en la actualidad tienen contratos de tres meses prorrogables". También ha lamentado que en el turno de noche "son sólo dos auxiliares quienes se quedan a cargo de los 35 usuarios".
La diputada provincial de Servicios Sociales y Centros Asistenciales, Lourdes Burgos, visitó este pasado jueves el centro y criticó la "irresponsabilidad" de los socialistas, además de recordar que el centro Guadalmedina "cada año pasa la revisión favorablemente por parte de la Junta de Andalucía", agregando que "no está en riesgo ni la salud de las personas ni el estado de mantenimiento del centro".
También añadió que la institución ha invertido cerca de 113.000 euros en reformas y en renovar parte de las condiciones del centro, y que se encuentra aprobado un plan de embellecimiento y mejora de infraestructuras que suma 200.000 euros.