MÁLAGA 30 Jun. (EUROPA PRESS) -
La portavoz de Educación del Grupo Socialista en el Parlamento de Andalucía, Beatriz Rubiño, ha criticado que el Consejo de Gobierno apruebe este martes un plan de acción educativa para el mes de septiembre cuyo borrador "no se ha mandado ni a los sindicatos, ni a las asociaciones de directores". "Es una imposición del Gobierno andaluz sin la participación de la comunidad educativa", ha dicho.
En declaraciones a los periodistas durante la protesta en Málaga del personal técnico de integración social de los centros escolares andaluces, Rubiño ha afirmado que los socialistas lamentan que "no se haya consensuado con la comunidad educativa y que no se les haya permitido realizar aportaciones al mismo".
Ha reclamado que el Gobierno de PP y Cs tiene que "dar garantías y certezas al profesorado y a las familias que van a mandar a sus niños a los centros educativos en el mes de septiembre" y ha considerado que "no puede ser que el Gobierno andaluz deje todo en manos de los equipos directivos". Además, ha señalado que hay que "estar preparados" para los rebrotes que puedan surgir.
"No sabemos cómo van a comenzar las clases", ha insistido Rubiño, apuntando que "muchos nos tememos que vuelvan a hacer lo de siempre: poner la pelota en el Gobierno central".
"Los socialistas consideramos que en materia educativa no se puede confrontar", ha dicho Rubiño, quien ha recordado que este jueves llevan a la Cámara andaluza una iniciativa "especialmente potente, una interpelación en esta materia que derivará en el siguiente pleno en una moción".
Al respecto, ha reclamado otro tipo de medidas, como la bajada la ratio, la adaptación de las infraestructuras educativas, la contratación de más plantilla, reforzar a colectivos y la lucha contra la brecha digital. "Con la educación no se juega", ha señalado.
Respecto al plan de refuerzo estival, la portavoz socialista lo ha tachado de "rotundo fracaso", ya que "aunque el Gobierno 'trifachito' lo intenta vender con su autobombo habitual, solamente han conseguido que se apunten 7.500 de los 700.000 alumnos de primaria y primer ciclo de secundaria a los que iba destinado", lo que supone que se han inscrito un uno por ciento de todos los posibles.
Respecto a la protesta del personal técnico de integración social de los centros escolares andaluces, la socialista ha criticado que la Junta "lleva dos meses sin pagar las nóminas de este colectivo", compuesto por más de 1.200 profesionales y que "está muy feminizado".
En este sentido, ha lamentado que estas trabajadoras "hayan sufrido los vaivenes del consejero del ramo, Javier Imbroda, y del presidente andaluz Juanma Moreno, que han convertido a la Consejería de Educación en una casa de los líos".
Rubiño ha afirmado que "tener a 1.200 profesionales sin cobrar dos nóminas es un claro ejemplo de lo que sucede cuando no se atiende a la comunidad educativa".