SEVILLA 29 Abr. (EUROPA PRESS) -
El delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, ha valorado este sábado que la joven de Torrox (Málaga) que estaba desaparecida junto a su novia, de nacionalidad egipcia, en Turquía, están ya "en España", concretamente en Barcelona, y "en buen estado de salud".
Así lo ha indicado el delegado en declaraciones a los medios tras asistir a la constitución del Centro de Coordinación Operativa (Cecop) de la Feria de Abril de Sevilla, y al hilo de un caso en el que, según ha destacado, se ha desarrollado "un trabajo intenso desde el punto vista diplomático" y también desde los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, y en contacto con los familiares de la joven.
"Lo más importante es que estas dos chicas se encuentran en nuestro país", ha señalado Sanz, para añadir que "ya hay que dejar que todo vuelva a la normalidad". Ha apuntado que "analizaremos los hechos" y "es un tema desde el punto diplomático que se seguirá trabajando", pero ha insistido en que "lo más importante es que están en España y en buen estado de salud".
Cabe recordar que la Guardia Civil de Málaga, en colaboración con la de Barcelona y autoridades españolas en Turquía, localizaron y participaron en la deportación de las jóvenes.
Este pasado viernes el ministro de Exteriores, Alfonso Dastis, confirmó que la joven de Torrox estaba recibiendo "asistencia consular" en Estambul, donde estaba detenida a la espera de ser deportada, para poder volver a su "vida normal".
El pasado miércoles una mujer residente en el municipio malagueño de Torrox denunció ante la Guardia Civil la desaparición de su hija, de 28 años, que se encontraba en Turquía junto a su pareja, una mujer musulmana junto a la que había huido de Dubái (Emiratos Árabes) tras ser denunciada esta por su propia familia debido a su relación homosexual.
La desaparecida, que trabaja en Londres, había viajado unos días antes a Dubái junto a su pareja --una mujer de nacionalidad egipcia, pero con residencia en este emirato-- para visitar a la madre de esta, pues la habían avisado de que se encontraba gravemente enferma, pero al llegar descubrieron que no era así y que, al parecer, todo era una estrategia del padre "para retenerla en ese país".
Entonces, según la madre de la joven, tuvieron que escapar del país y recalaron en Georgia, donde, tras pasar tres días en casa de unos amigos, iban a tomar el vuelo de regreso pero tampoco pudieron.
Tras la denuncia y la colaboración de las autoridades españolas, se localizó a las jóvenes, que están ya en España.