SEVILLA 19 Jun. (EUROPA PRESS) -
Alrededor de 400 niños y niñas de Sevilla se benefician desde el inicio de la crisis del coronavirus Covid-19 del programa 'A tu lado', que da respuesta a las necesidades sobrevenidas que la situación de confinamiento y la suspensión de clases escolares presenciales ha provocado en las familias con hijos e hijas a cargo que partían de una situación de especial vulnerabilidad.
La Fundación Endesa colabora con la ONG Save the Children en esta iniciativa, con una aportación económica de 45.000 euros que cubre las necesidades de un centenar de esos menores, reforzando así la ayuda que reciben desde este mes y hasta octubre.
Los niños y niñas que participan en la intervención de Save the Children pertenecen a unas 300 familias de las zonas de Torreblanca, Bellavista, Bermejales, Tiro de Línea, San Pablo, La Algaba, Palmete, Polígono Norte y Tres Barrios Amate, según detalla la Fundación Endesa en un comunicado.
El origen de este programa surgió tras comprobar la ONG que los niños y niñas de estas familias, que ya vivían en situación de pobreza, estaban encontrando nuevos problemas agudizados o sobrevenidos por la pandemia del Covid-19. Así, por ejemplo, la falta de acceso a la alimentación básica que tenían antes en los comedores escolares o la imposibilidad de cubrir determinadas necesidades que hoy día se han convertido en básicas, como tener conexión a Internet para poder seguir dando clases, hacía que se quedasen en una situación de desigualdad grave.
El programa 'A tu lado' persigue ofrecer una respuesta rápida a la crisis igualmente rápida y profunda que ha generado el Covid-19, ofreciendo acceso a estos niños y niñas a una alimentación básica, a una atención psicológica y la posibilidad de seguir con su educación. Los beneficiarios son familias en situación de exclusión social, especialmente monomarentales, sin recursos específicos y colectivos vulnerables, como víctimas de violencia.
Este programa se basa en tres pilares, que se orientan a reducir el grave daño que la situación tiene en la infancia, dando así una respuesta rápida para la emergencia económica, la emergencia educativa y la emergencia psicológica. El objetivo es garantizar el acceso a una alimentación básica, el refuerzo escolar y la atención individualizada de profesionales para paliar los efectos del aislamiento, la incertidumbre y el estrés en los niños y niñas.
BECAS DE ALIMENTACIÓN
Por un lado, las familias están empezando a recibir becas de alimentación, de 30 euros cada dos semanas para que quienes más lo necesitan puedan adquirir alimentos básicos, trabajando con ellos, en paralelo, para ofrecer a los niños y niñas una dieta nutricional saludable. El fin es garantizar la seguridad alimentaria de los menores, mejorando además su rendimiento y contribuyendo a su adecuado desarrollo.
En segundo lugar, se facilitan becas que ayudan a las familias a hacer frente a gastos básicos para garantizar que cubren necesidades primarias como cuestiones de salud (medicamentos y tratamientos específicos, gafas, audífonos u otras necesidades especiales); higiene, alojamiento, suministros o complementación alimentaria.
De esta forma, con el fin de ayudar a las familias en situación más vulnerable y reducir el impacto en los niños y niñas de esos hogares en estos momentos donde las familias se encuentran con menos ingresos y gastos adicionales, Save the Children pone a disposición de las familias dotaciones no restringidas de dinero de cien euros por niño o niña becado y mes.
CONEXIÓN A INTERNET Y TABLETS
En paralelo, los niños, niñas y adolescentes más vulnerables de los programas de intervención educativa de Save the Children reciben apoyo escolar a distancia y se les proporcionan herramientas tecnológicas con medidas como conexión a Internet o distribución de tablets.
También se les facilita un paquete de materiales para poder trabajar desde casa las actividades escolares y de ocio (lápices de colores, rotuladores, ceras, plastilina, sacapuntas, lápiz, gomas y folios). Durante el verano, se hará refuerzo educativo, pero también se introducirán actividades de ocio que ayuden a desarrollar su potencial de manera lúdica.
Todas estas medidas dirigidas a niños y niñas están acompañadas de un servicio de apoyo psicológico y de acompañamiento a padres y madres, con pautas de crianza y educación positiva.