SEVILLA, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Junta de Andalucía ha acordado este miércoles mantener el horario de la limitación general de la movilidad nocturna inicialmente fijado por el Gobierno de España en la franja de 23,00 a 6,00 horas de manera que, en coherencia, fija el cierre de todos los establecimientos de hostelería a las 22,30 horas, al tiempo que limita a seis personas las reuniones tanto en el ámbito público como privado, salvo entre convivientes.
El presidente de la Junta, Juanma Moreno, ha informado de estas medidas, que entrarán en vigor a partir de las 00,00 horas de este viernes 30 de octubre y hasta el 9 de noviembre, con el objetivo de frenar los contagios por coronavirus, en una comparecencia telemática en San Telmo tras presidir una reunión del Consejo Asesor de Alertas de Salud Pública de Alto Impacto, más conocido como 'comité de expertos', donde también se ha acordado decretar el cierre perimetral de la comunidad autónoma hasta el 9 de noviembre.
Ha informado de que todas las medidas adoptadas este miércoles estarán activas desde la medianoche de este jueves y hasta el 9 de noviembre, "fecha hasta la que por el momento está vigente el estado de alarma decretado por el Gobierno".
El decreto de estado de alarma aprobado el pasado domingo por el Consejo de Ministros en una reunión extraordinaria establece una limitación general de la movilidad nocturna entre las 23,00 y las 6,00 horas en España, si bien las comunidades pueden adelantar o retrasar la hora de comienzo de la misma entre las 22,00 y las 0,00 horas, y la de finalización entre las 5,00 y las 7,00 horas.
En virtud de esa facultad que se concede a las comunidades autónomas, la Junta de Andalucía ha decidido mantener el horario establecido por el Ejecutivo central aunque ordena el cierre de toda la hostelería a las 22,30 horas por "coherencia", como ha afirmado Moreno.
El jefe del Ejecutivo andaluz ha explicado que, a partir del 9 de noviembre, "la Junta revisará las medidas cada dos semanas, salvo incidencias de urgencia", y ha indicado que ya ha dado traslado de las mismas a la delegada del Gobierno en Andalucía, Sandra García; al presidente de la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP), Fernando Rodríguez Villalobos, y a los líderes de los grupos parlamentarios.
"Andalucía actúa con prontitud, rigor y equilibrio", ha sostenido Moreno antes de recalcar que la prudencia es "la máxima que guía la acción" de su gobierno y que "más vale prevenir que curar", así como ha asegurado que no descarta tomar medidas más difíciles si la situación la pandemia no evoluciona favorablemente.
MÁS MEDIOS PARA LA POLICÍA Y LA GUARDIA CIVIL
Moreno ha sostenido que Andalucía "asume con responsabilidad" la competencia que ha otorgado a los gobiernos regionales el Ejecutivo central, si bien le ha hecho un llamamiento "especial" entendiendo que "en su mano está gran parte del éxito o del fracaso" de estas medidas.
En concreto, ha indicado que Andalucía, a diferencia de otras comunidades autónomas como el País Vasco, Cataluña o Navarra, "no tiene una policía autonómica a la que podamos encomendar la vigilancia del cumplimiento de estas medidas".
Por eso, el presidente de la Junta ha dicho que espera del Gobierno de Pedro Sánchez "máxima coordinación para que la Policía Nacional, Policía Local y la Guardia Civil, dispongan de los medios necesarios y reciban las instrucciones precisas para hacer cumplir estas normas".
Así las cosas, Moreno ha indicado que las medidas acordadas "podrán poner una barrera para contener o frenar el virus pero no acabarán con él, eso solo pasará cuando haya una vacuna o un tratamiento eficaz, y nadie está en condiciones de asegurar cuándo llegará ese momento".
Antes de la declaración del segundo estado de alarma por la pandemia del coronavirus decretado en España en lo que va de año, la Junta ya había acordado restringir la movilidad nocturna desde este pasado lunes, 26 de octubre, en Granada capital y los municipios de su área metropolitana; en concreto, Albolote, Alfacar, Alhendín, Armilla, Atarfe, Cájar, Cenes de la Vega, Cijuela, Cullar-Vega, Chauchina, Churriana de la Vega, Dílar, Fuente Vaqueros, Gójar, Guevejar, Huetor-Vega, Jun, Lachar, Maracena, Monachil, Ogíjares, Otura, Peligros, Pinos-Genil, Pinos-Puente, Pulianas, Santa Fe, Viznar, La Zubia, Las Gabias, Valderrubio y Vegas del Genil.
Así, la Junta estableció, con carácter temporal y excepcional en dichos municipios granadinos, la limitación de la movilidad de las personas en la franja horaria que transcurre desde las 23,00 hasta las 6,00 horas como medida específica de contención y prevención para hacer frente a la crisis sanitaria ocasionada por el coronavirus.
Además, en Andalucía ya existían limitaciones al horario de apertura de establecimientos de hostelería, entre otras restricciones, en determinados municipios, entre los que figuraban las capitales de Sevilla, Córdoba, Granada y Jaén, así como en las localidades de Los Gallardos (Almería), Baeza y Quesada (Jaén); Estepa, Lora de Estepa, Gilena, Marinaleda, Herrera, La Roda de Andalucía, Badolatosa, Utrera, Castillo de las Guardas y Pedrera (Sevilla).
En todos estos municipios se acordó que los establecimientos de hostelería y restauración limitasen el aforo al 50 por ciento y, entre otras cuestiones, que la hora de cierre no pudiese superar en ningún caso las 22,00 horas, a excepción de servicios de entrega de comida a domicilio.
Por su parte, la Federación de Empresarios de Hostelería de Andalucía (Horeca Andalucía) pidió el pasado lunes a la Junta que retrasase el inicio del toque de queda hasta las 0,00 horas, lo que les permitiría dar los servicios de cena y "salvar muchos puestos de trabajo", según argumentó el vicepresidente de dicha entidad, Antonio Luque.