GRANADA 11 Oct. (EUROPA PRESS) -
La asociación Acompalia, nacida en 2012 en la costa de Granada para dar apoyo a enfermos terminales durante sus últimos días y a sus familiares tras la pérdida, abrirá el próximo mes de noviembre un pequeño centro de cuidados paliativos en Lanjarón (Granada) después de que un vecino del municipio les haya cedido un local, "sin cobrar el alquiler", para que tengan un lugar concreto donde realizar su actividad.
Así lo ha explicado a Europa Press la presidenta de Acompalia, Lindsay Ostervig, quien ha asegurado que seguirán adelante con el proyecto del gran centro de día y residencia proyectado en unos terrenos de Playa Granada de Motril para los que llevan "más de un año tramitando el certificado de utilidad pública y siempre necesitan un documento más".
Acompalia comenzó su andadura hace tres años, cuando hicieron pública su intención de construir un centro para hacer pasar de manera más agradable a los enfermos sin cura el tránsito hacia el siguiente paso, diseñado por el arquitecto motrileño Ángel Gijón y en unos terrenos cedidos por el Ayuntamiento de Motril para lo que hacía falta recaudar dos millones de euros con el fin de comenzar las obras.
Ha pasado el tiempo y, aunque esta residencia de día aún no ha visto la luz, el trabajo de la veintena de voluntarios de la asociación no ha cesado dando colaborando con personas de toda la comarca, ayudándolas en sus visitas al médico o dando consuelo a las personas que los rodean, de manera paralela a un intensa actividad para recaudar fondos para el gran centro.
Ahora, con la cesión gratuita del nuevo local --que cuenta con una zona de tienda, otra de oficina y una sala para el trabajo del voluntariado--, ya contarán con una sede donde los interesados podrán acudir, "aunque se mantendrá el trabajo a domicilio y por la línea telefónica de ayuda" porque ya son muchas las personas que "han calmado ante la muerte" y cada vez más se va acabando con el estigma de su nacionalidad extranjeras "y los españoles se animan a colaborar en la asociación".
A pesar de todos estos avances, el retraso de la llega del certificado de utilidad pública está ralentizando la construcción del centro de cuidados paliativos y es que, tras un año enviando documentación "siempre" falta algún papel: "Cada vez que recibo una carta pienso que es la resolución pero es una nueva petición", ha reiterado Ostervig, quien ha narrado que "primero se paralizó en Granada y, una vez desbloqueada, está en Madrid y siempre se espera que esté listo para el próximo mes".
El cambio de gobierno local tras las elecciones municipales de mayo ha provocado, además, que las relaciones institucionales "tengan que comenzar de nuevo desde cero" para poder lograr de nuevo "confianza y relaciones fluidas", ha concretado Lindsay Ostervig aunque ha precisado que ya ha mantenido una reunión con el concejal de Urbanismo, Antonio Escámez (PA), y "se ha mostrado dispuesto a apoyar el proyecto".
La utilidad pública, según ha aclarado la presidenta de Acompalia, desbloquearía "grandes ayudas económicas" de empresas de Motril que, "mientras tanto no pueden invertir su dinero", algo que haría subir "considerablemente" la cuantía de 50.000 euros que se han logrado hasta el momento.