JAÉN 25 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Sección Tercera de la Audiencia de Jaén juzga a un hombre, G.L.F., de 42 años, acusado de abusar sexualmente de forma continuada de sus dos hijas cuando estás contaban con once y ocho años. Por estos hechos, el Ministerio Fiscal le reclama 15 años de prisión y otros 21 años de prohibición de comunicación y acercamiento con su exmujer e hijas.
El juicio se ha celebrado este miércoles a puerta cerrada por petición expresa del Ministerio Fiscal. Según recoge el escrito de calificación de Fiscalía al que ha accedido Europa Press, el acusado sometió a sus dos hijas a diversos tocamientos con "evidente intención de satisfacer sus deseos sexuales".
Además, el fiscal le acusa de realizar "frecuentes conductas de contenido sexual" delante de las dos pequeñas. En lo que respecta a la madre, el Ministerio Público señala que el acusado "controlaba de modo desmedido" tanto las amistades como el dinero y las relaciones familiares. Le acusa de "atemorizar" a su mujer con "cortarle el cuello si lo dejaba" y apunta a que llegó a esconder grabadoras por toda la casa al objeto de grabar las conversaciones por sus sospechas de infidelidad.
Insultos, amenazas, control telefónico y de las redes sociales de su mujer son algunas de los episodios que relata el Ministerio Fiscal para argumentar su acusación de malos tratos habituales. Además, de la pena de prisión, el Ministerio Público reclama una indemnización de 10.000 euros para cada una de sus dos hijas por el daño moral.
Las dos menores muestran "dificultades emocionales que pueden hacerles mella en su desarrollo evolutivo". De hecho la mayor, actualmente con 14 años, padece tricotilomanía por episodios de ansiedad y se encuentra en tratamiento psicológico y psiquiátrico. También la más pequeñas sufre de pesadillas de manera recurrente y ambas rechazan la figura paterna.
Desde septiembre de 2016 hay un auto judicial que prohíbe al acusado acercarse y comunicarse con su exmujer y con sus dos hijas.