Ayuntamiento de Granada y vecinos se reúnen el miércoles para abordar la ubicación del Festival de Rock del Zaidín

GRANADA 4 Mar. (EUROPA PRESS) -

El Ayuntamiento de Granada y la Asociación de Vecinos del Zaidín mantendrán una reunión este miércoles para abordar la ubicación que tendrá el Festival de Rock del barrio, el más antiguo de Europa con entrada gratuita, después de que el colectivo haya solicitado los permisos para celebrar una nueva edición.

Los vecinos desean que este festival, que vio la luz en 1983, cuente ya con una ubicación definitiva y han propuesto varias opciones al Ayuntamiento. Aunque, al margen de esta decisión a largo plazo, debe definirse al menos dónde se celebrará el próximo septiembre, puesto que en el solar que lo ha acogido en los últimos años se está construyendo un gran parque.

El presidente de la Asociación de Vecinos del Zaidín, Antonio Ruiz, ha explicado a Europa Press que la organización del festival ya está trabajando contratando a grupos, por lo que necesitan cerrar ya el emplazamiento, y reconoce que le gustaría que fuera el definitivo.

El colectivo quiere que el afamado festival de rock se desarrolle "cerca de las fiestas" del barrio, como se ha hecho siempre, y entre las propuestas que ha trasladado al Ayuntamiento se encuentra la del solar de 15.000 metros cuadrados donde estaban las escombreras del metro, junto al aparcamiento que está a las espaldas del Estadio Nuevo Los Cármenes.

Algunos vecinos de esta zona están en contra de acoger junto a sus viviendas el certamen, pero la asociación afirma que trabajaría para que las molestias fueran mínimas durante las tres noches en que se desarrolla.

Otra de las opciones que no ve con malos ojos el colectivo del Zaidín es ubicarlo en la explanada que hay entre el Palacio de Deportes y el campo de fútbol, donde ya se hizo un año.

No obstante, Ruiz reconoce que al margen de estas y otras opciones propuestas, siguen apostando por la construcción de un auditorio con capacidad para 20.000 personas en un solar frente al Cortijo de la Nocla que no serviría solo para el festival sino para cualquier evento de la ciudad que se produjera a lo largo del año y cuya construcción estaría sufragada por una empresa del sector a cambio de explotarlo durante el tiempo que se acordara.