CÓRDOBA 28 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Montilla (Córdoba) ha contactado en las últimas semanas, tanto con el Ayuntamiento de Espejo (Córdoba), como la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, "en busca de información sobre la actividad de la orujera" instalada en el término municipal de Espejo, y también para "solicitar la ampliación de la evaluación de impacto ambiental".
Según ha informado el Ayuntamiento montillano en una nota, la teniente de alcalde de Infraestructuras y Medio Ambiente, Raquel Casado, ha confirmado que esa petición de documentación se hace porque, "tras la consulta del expediente que es público en la web de la Junta, echamos en falta cierta información relativa a la afección a Montilla de esta instalación, sobre todo cómo nos afectan los olores y la contaminación atmosférica que genera esta actividad".
Casado se ha referido a aspectos como el de la distancia con núcleos urbanos y la prevalencia de los aires en esta zona de la Campiña Sur, para reclamar la ampliación de la evaluación de impacto ambiental. "En principio --ha precisado--, estas instalaciones, según dice la norma, deben estar como mínimo alejadas 5,5 kilómetros y, sin embargo, las primeras viviendas de Montilla se encuentran a menos de cinco kilómetros".
Para la edil montillana, "si bien el impacto paisajístico puede tener difícil solución, el tema de los olores, por las molestias que genera entre la población, se debe estudiar", y ha añadido que la petición del Consistorio montillano incluye "que se hagan mediciones, tanto a pie de fábrica, en la salida de las chimeneas, como en Montilla, para analizar la calidad del aire que existe en la ciudad en los días de mayor impacto del humo".
Por el momento, el Ayuntamiento de Espejo le ha remitido ya la información que obra en el expediente municipal tramitado por la empresa, por lo que el Ayuntamiento de Montilla queda "a la espera de recibir la documentación solicitada a la Delegación Territorial de Medio Ambiente" de la Junta.
Desde el Ayuntamiento de Montilla se quiere dejar claro que la actividad que realiza la orujera es "necesaria y viene a dar respuesta al problema grave de los orujos que genera la industria agrícola de nuestra comarca", de modo que "el tratamiento del residuo que se hace en este tipo de instalaciones es correcto, a fin de evitar contaminaciones de suelo y de acuíferos".
No obstante, "el revuelo que ha surgido entre la población en los últimos meses y las molestias que viene originando motivan que desde el Ayuntamiento de Montilla pongamos en marcha una serie de actuaciones", según ha concluido Raquel Casado.