Santaella (Córdoba) pide a la Junta y a un juzgado la devolución de un busto romano del siglo II

SANTAELLA (CÓRDOBA), 21 (EUROPA PRESS)

El Ayuntamiento de Santaella (Córdoba) ha remitido sendos escritos, a la Dirección General de Patrimonio Histórico y Documental de la Junta de Andalucía y al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número uno de Écija (Sevilla), para solicitar que un busto del emperador romano Adriano, que data del siglo II, sea devuelto al municipio, ya que supuestamente fue expoliado en un yacimiento de la localidad.

Así se recoge en los citados escritos, firmados por el alcalde de Santaella, José Álvarez (PSOE), a los que ha accedido Europa Press, y en los que se señala que el pasado julio, en el marco de "la operación 'Bustiano' de la Guardia Civil, se ha requisado una excepcional pieza arqueológica, un busto del emperador Adriano del siglo II, localizada en una finca en la localidad de Écija, pero procedente de un yacimiento arqueológico ubicado en el término municipal de Santaella", según informaciones periodísticas publicadas en su momento.

Ante ello, el alcalde ha pedido a la Junta, y así lo ha comunidado también al juzgado astigitano, "que se considere como destino adecuado, para el depósito y custodia de tan valiosa escultura romana, el Museo Histórico Municipal de Santaella, de carácter público, legalmente constituido y autorizado por la Consejería de Cultura y, por tanto, con todas las garantías para tal fin".

En el Ayuntamiento de Santaella, en cualquier caso, son "conscientes de que en este momento aun no ha terminado el proceso penal por delito contra el patrimonio, que a instancias de la Fiscalía correspondiente se instruye" en el Juzgado de Écija, "por lo que la pieza se encuentra en depósito judicial en el Museo Arqueológico de Sevilla, pero en caso de confirmarse que el busto del emperador Adriano del siglo II tiene su origen en el expolio de un yacimiento arqueológico de Santaella, deberá ser nuestro municipio donde quede depositada y expuesta, sin perjuicio de las actuaciones que la Administración competente en patrimonio disponga previamente para su restauración y catalogación".

El Consistorio se apoya para ello en "lo establecido en el Título V de la Ley 14/2007, del Patrimonio Histórico de Andalucía, que en el artículo 50 dispone el depósito en museo o institución que se determine para los hallazgos arqueológicos casuales con valor patrimonial, debiendo tenerse en cuenta lo establecido en el artículo 42.2 de la Ley 16/1985, de 25 de junio, del Patrimonio Histórico Español, que obliga a entregar los objetos, debidamente inventariados y catalogados, al museo o centro que la Administración competente determine y en el plazo que se fije, teniendo en cuenta su proximidad al lugar del hallazgo y las circunstancias que hagan posible, además de su adecuada conservación, su mejor función cultural y científica'".

Todo ello lleva al alcalde "a requerir su cumplimiento y que sea en Santaella y en su Museo Histórico Municipal donde quede depositada y expuesta la escultura indicada, considerando que la importancia y valor histórico y cultural se completa si permanece en el entorno del lugar para el que sería concebida en su origen, fijando y sumando ese valor histórico y patrimonial al municipio donde apareció, siendo conscientes en todo momento de la importancia de la pieza y su carácter de patrimonio histórico".

En base a lo expuesto y "al interés legítimo de este Ayuntamiento en la defensa y recuperación" de su patrimonio, el alcalde de Santaella solicita a la Junta, "como Administración autonómica competente en materia de patrimonio arqueológico", que le "informen adecuadamente sobre este asunto y disponga lo necesario, conforme a lo requerido, para que finalmente la escultura vuelva a Santaella".

La pieza, según ha informado 'Diario Córdoba', fue localizada el pasado mes de julio gracias a una investigación iniciada a principios de año por la Guardia Civil de Sevilla, que tuvo conocimiento de un intento de transacción comercial en torno a una pieza "de gran valor" por la que sus poseedores pedían una cantidad próxima a los 500.000 euros.